
El mandatario francés Emmanuel Macron destacó la importancia de no solo firmar acuerdos, sino también de cumplir con cada uno de los compromisos acordados, con el objetivo de garantizar la estabilidad y el bienestar de las comunidades afectadas por los enfrentamientos en la región de los Grandes Lagos. Macron insistió en que la paz duradera para las poblaciones del este de la República Democrática del Congo (RDC) y para todo el entorno regional depende del respeto a lo estipulado en el pacto más reciente entre RDC y Ruanda, según consignó el medio Europa Press.
De acuerdo con Europa Press, el jefe de Estado francés expresó su satisfacción ante la firma del acuerdo de paz celebrado el jueves en Washington, y recordó que su país ya había reafirmado su compromiso con los habitantes perjudicados por el conflicto durante la conferencia internacional organizada en París a finales de octubre. En esa ocasión, Francia lideró una recaudación de recursos internacionales que alcanzó los 1.500 millones de euros, orientados a ayudar a las personas desplazadas y dañadas por la violencia en el este congoleño y áreas aledañas.
Macron compartió su mensaje a través de su cuenta en la red social X, donde subrayó que las negociaciones llegaron a buen puerto gracias al esfuerzo conjunto de actores diplomáticos clave: Estados Unidos, Qatar y Togo, con este último representando el rol de mediador bajo el respaldo de la Unión Africana. “Acojo con satisfacción la firma de un acuerdo de paz en Washington entre República Democrática del Congo y Ruanda”, señaló el presidente francés, quien pidió a todas las partes involucradas que se mantengan firmes en sus promesas para lograr una solución sostenida en la región.
El acto de la firma en Washington reunió no solo a los presidentes de la RDC y Ruanda, Félix Tshisekedi y Paul Kagame, respectivamente, sino también al mandatario estadounidense Donald Trump. Durante la ceremonia, Trump anunció el establecimiento de acuerdos bilaterales con ambos países, indicando que estos abrirán oportunidades comerciales y estratégicas para Estados Unidos, particularmente en el ámbito de los minerales críticos, según reportó Europa Press.
Europa Press precisó que el proceso de diálogo que desembocó en los denominados ‘Acuerdos de Washington’ se remonta a inicios de este año, cuando el conflicto entre RDC y Ruanda experimentó una escalada tras la ofensiva del grupo rebelde M23, integrado en su mayoría por combatientes tutsis congoleños. Este movimiento logró tomar control de las capitales de Kivu Norte y Kivu Sur, dos provincias clave en el este del Congo, hecho que intensificó el cruce de acusaciones entre ambos gobiernos.
La RDC denunció la presunta cooperación de Ruanda con el M23, mientras que las autoridades ruandesas acusaron a Kinshasa de reprimir a la minoría tutsi con la ayuda de organizaciones armadas como las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y otras milicias congoleñas. Europa Press indicó que el FDLR fue fundado por hutus que abandonaron Ruanda tras el genocidio de 1994, y se mantiene como actor relevante en la dinámica de inseguridad en la zona.
Macron recalcó que París mantendrá su respaldo a los mecanismos internacionales enfocados en reducir la tensión y atender a la población afectada. En ese sentido, recordó los esfuerzos previos de su Gobierno, ponentes en la cumbre internacional de otoño pasado en la capital francesa, donde se formalizó una plataforma de cooperación entre países donantes, organismos multilaterales y representantes de la sociedad civil para coordinar el reparto y uso de los fondos obtenidos para la asistencia humanitaria.
Los factores que propiciaron la iniciativa diplomática en Washington comprendieron no solo la preocupación por las hostilidades recientes, sino también el impacto humanitario y las implicancias económicas y de seguridad derivadas del acceso a recursos minerales estratégicos presentes en el este del Congo, detalló Europa Press. Estados Unidos, por su parte, presentó los recientes acuerdos como parte de una estrategia más amplia para fomentar la estabilidad regional y fortalecer los lazos entre Kinshasa, Kigali y socios internacionales.
El acuerdo establece lineamientos para la desmovilización de grupos armados, el retorno seguro de las personas desplazadas y la protección de las minorías, así como marcos de cooperación para la explotación regulada de recursos naturales, siempre enfocados en atender necesidades de la población civil y reducir la financiación de la violencia, puntualizó Europa Press.
A lo largo de su declaración pública, Macron reiteró su llamado a todos los actores implicados, incluidos los gobiernos involucrados y las agrupaciones que operan en el terreno, para que prioricen los intereses de las comunidades impactadas y asuman cabalmente el cumplimiento de las disposiciones establecidas en el nuevo pacto. Europa Press añadió que el Ejecutivo francés remarcó la relevancia del acompañamiento internacional y la vigilancia continua sobre la evolución de los compromisos alcanzados, a fin de evitar retrocesos y fomentar avances sostenidos hacia la paz en la región.
