
El colapso registrado en el kilómetro 3.5 de la avenida Néstor Gambetta, en Ventanilla, ha provocado una emergencia que afecta la conectividad vial del litoral central de Lima y el Callao.
La afectación en la carpeta asfáltica motivó la intervención inmediata del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), entidad que anunció restricciones a la circulación tanto para vehículos de carga superior a 6,5 toneladas como para autos ligeros, priorizando la seguridad y la prevención de accidentes en la zona.
El incidente fue precedido por hundimientos en el pavimento durante las últimas dos semanas. Este proceso incrementó la congestión vehicular y obligó a que los vehículos circularan por carriles alternos mientras se evaluaba la magnitud de los daños.
En respuesta, el MTC implementó un plan de desvío. Los vehículos de carga deberán emplear la carretera Panamericana Norte hasta el óvalo Naranjal y de ahí continuar por la av. Canta Callao, ruta dispuesta para ambos sentidos de tránsito.

Esta medida busca mantener la circulación del transporte logístico entre el puerto del Callao y las zonas industriales, evitando un mayor impacto en las operaciones portuarias y en la economía local.
Mientras tanto, los autos ligeros y el transporte público urbano podrán seguir utilizando la av. Néstor Gambetta hasta el ingreso a Mi Perú. Desde ese punto, la ruta continuará por la prolongación de la av. Víctor Raúl Haya de la Torre hasta conectar con las avenidas Cusco y De la Revolución, luego por la calle Pavayacu y, finalmente, retomar a la principal arterial vial.
De esta manera, se procura aliviar la congestión y mantener alternativas de desplazamiento para quienes se movilizan entre los distritos residenciales y zonas de servicios del norte de la ciudad.

En su comunicado del 24 de septiembre, el MTC informó que destinó más de S/200 mil para reparaciones temporales en la vía. Estos trabajos incluyeron relleno, compactación, reposición asfáltica, instalación de señalización y colocación de barreras de seguridad.
La emergencia generó preocupación entre los residentes del asentamiento humano Cruz de Motupe, situado cerca del socavón. Los vecinos que viven junto a la vía manifestaron temor por las vibraciones producidas por el tránsito de camiones y vehículos de gran tamaño.
En ese contexto, la av. Gambetta es considerada esencial, ya que enlaza el puerto y los terminales logísticos del Callao con los mercados y centros industriales de Lima y provincias aledañas.
Cualquier interrupción en este corredor vial tiene repercusiones inmediatas en la circulación y las actividades económicas, debido a su condición de arteria fundamental para el transporte de mercancía y pasajeros entre distintos puntos del país.
Las autoridades continúan monitoreando la situación e instan a transportistas y ciudadanos a respetar las nuevas disposiciones para garantizar la seguridad y el flujo vehicular en la zona afectada.
