En plena guerra mediática contra la hermana de Michu, Tamara Rodríguez, tras el fallecimiento de la joven el pasado 7 de julio a causa de un fallo cardíaco, Gloria Camila ha cumplido con su palabra y se ha desplazado hasta la localidad gaditana de Arcos de la Frontera para recoger a su sobrina Rocío y disfrutar con ella del fin de semana en la playa.
Mientras la tía materna de la niña insiste en que los Ortega Cano no se ocupan ni se preocupan de la menor, y asegura que serán ella y su madre, Inma Gamaza, las que se harán cargo de la pequeña, el torero ha movido ficha y ha puesto a trabajar a sus abogados para solicitar la tutela legal de su nieta, dispuesto a luchar judicialmente para que la hija de José Fernando y Michu viva con ellos en Madrid.
Y horas después de que saliese a la luz que el hijo de Ortega Cano llamó el pasado martes a la abuela de la niña para decirle que se irá con él a la capital, y que si no puede hacerse cargo lo hará su hermana, Gloria Camila se ha reencontrado con su sobrina confirmando que por supuesto que está pendiente de ella tras el trágico fallecimiento de su mamá.
Acompañada por su hermano José María -fruto del matrimonio de Ortega y Ana María Aldón-, la colaboradora se ha desplazado en coche hasta la casa de Inma Gamaza en Arcos de la Frontera y ha salido de allí con la pequeña Rocío, encantada de ver a su tía, cogida de la mano.
Antes de poner rumbo a la playa, y pidiendo a la prensa que no grabasen a la menor, Gloria Camila y los pequeños han entrado en un conocido supermercado para comprar todo lo necesario para disfrutar del día con su sobrina.