
El Movimiento de Resistencia Islámica, Hamás, informó que durante el mes transcurrido desde la firma del acuerdo mediado por Estados Unidos se han producido 271 muertes y 622 heridos palestinos a causa de ataques del Ejército de Israel, además de arrestos, destrucción de viviendas y restricciones en el ingreso de ayuda humanitaria. Este balance ha sido presentado por Hamás en medio de denuncias de reiteradas violaciones al acuerdo por parte de Israel y nuevas exigencias dirigidas a los actores internacionales para que presionen a fin de asegurar el cumplimiento de los compromisos pactados.
Según publicó la agencia Europa Press, la organización palestina remitió un comunicado en el que destaca su respeto al acuerdo mientras critica lo que describe como una búsqueda activa de pretextos por parte de las autoridades israelíes para eludir sus obligaciones. Hamás afirmó que, casi desde el inicio, Israel viene adoptando medidas consideradas contrarias al acuerdo, entre ellas la limitación del acceso a la ayuda humanitaria, el mantenimiento del cierre en el paso de Rafá, y la prohibición a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) de operar en la zona.
El grupo indicó que, en el primer mes tras la firma, sólo ingresó menos del 40 por ciento de los camiones de ayuda humanitaria previstos: “La ayuda humanitaria real no superó el 40 por ciento del total de camiones que ingresaron durante el primer mes, lo que representa menos de 200 camiones por día”, de los 600 acordados, explicó Hamás en el comunicado reproducido por Europa Press. Una situación semejante afecta a la entrega de combustible, cuya escasez obstaculiza el funcionamiento de hospitales, la circulación de transporte, la rehabilitación de enclaves y la apertura de carreteras. La importancia de este recurso reside en que permite mantener en operación los generadores de centros de atención médica y sostiene las tareas básicas para la vida diaria de la población.
Hamás también subrayó la negativa israelí a facilitar el acceso de maquinaria pesada a Gaza, herramienta considerada esencial para remover escombros y localizar los cuerpos de personas fallecidas entre las ruinas, tras los bombardeos y enfrentamientos armados. A pesar del escenario, Hamás aseguró haber entregado en las primeras 72 horas los cuerpos de 20 rehenes israelíes vivos que permanecían en Gaza y continuó con la entrega de los cadáveres de otros 24, además de coordinar la ubicación de los restos de otros retenidos. Europa Press detalla que la agrupación palestina precisó: Hamás “logró recuperar 24 de los 28 cuerpos” y “proporcionó las coordenadas de la ubicación de otros cuerpos en zonas bajo control de la ocupación”.
En cuanto a la liberación de los cuerpos de los rehenes, Hamás indicó que mantiene “intensos esfuerzos” para encontrar los cuatro restos aún no localizados. El grupo reivindica que, pese a las dificultades, ha respetado las condiciones del acuerdo en cuanto a la liberación y localización de rehenes, tanto vivos como fallecidos.
En el plano político, Hamás denunció en declaraciones recogidas por Europa Press una serie de manifestaciones públicas de representantes políticos, militares y de seguridad israelíes que, según la organización, alientan abiertamente a reanudar la guerra e ignoran lo acordado, desoyendo a la comunidad internacional.
La organización cerró su comunicado reclamando a los intermediarios y a la comunidad internacional una intervención más contundente ante lo que interpreta como una tendencia de Israel a no respetar el plan. Hamás solicitó el cumplimiento estricto del pacto, el levantamiento de las restricciones a la ayuda humanitaria y el combustible, así como la apertura de varios pasos fronterizos y la posibilidad de introducir el equipamiento necesario para poner en funcionamiento la central eléctrica local. Los pedidos, según reportó Europa Press, incluyen demandas para mejorar la infraestructura afectada y garantizar la atención básica de la población gazatí.