
El Gobierno británico ha anunciado este sábado que dará a Sudán cinco millones de libras (unos 5.600.000 de euros) adicionales en concepto de «ayuda vital», tras la toma de la ciudad de El Fasher por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), un hecho que ha desatado una ola de violencia étnica, abusos sexuales y hambruna en la región de Darfur Norte.
«Hoy anuncio que el Gobierno de Reino Unido aportará otros cinco millones de libras esterlinas en ayuda humanitaria en respuesta a la violencia en El Fasher, que se suman a los 120 millones de libras (unos 136 millones de euros) que Reino Unido ya está proporcionando este año en todo Sudán», ha informado la ministra de Asuntos Exteriores, Yvette Cooper, quien ha subrayado que la desesperación y el sufrimiento provocadas por este conflicto «olvidado» no hacen sino aumentar.
Cooper ha denunciado que alrededor de 260.000 personas, la mitad de ellas niños, en El Fasher viven a diario «escenas verdaderamente horribles e intolerables»: «Están atrapadas en condiciones similares a la hambruna, rodeadas de violencia y sin acceso a la ayuda humanitaria», ha lamentado durante una conferencia celebrada en Bahréin.
Se trata de «la mayor crisis humanitaria del siglo XXI», ha alertado, criticando la falta de liderazgo y cooperación internacional para abordar la «devastadora» situación en el país africano.
El nuevo paquete de ayuda anunciado por Reino Unido contempla fondos para el suministro de alimentos de emergencia y atención médica. Asimismo, unos dos millones de libras de la cantidad total irán destinados específicamente a apoyar a las supervivientes de violencia sexual. Todo ello, a través de socios internacionales como el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) o el Fondo Humanitario para Sudán.
La reciente toma de la capital de la región sudanesa de Darfur Norte, El Fasher, por parte de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) y las atrocidades cometidas por el grupo paramilitar han derivado en una cascada de condenas internacionales contra las acciones de la formación, fundada durante el régimen de Omar Hasán al Bashir como amalgama de las milicias ‘yanyauid’, ya implicadas en el conflicto desde 2003 en Darfur, escenario de crímenes de guerra y contra la humanidad, incluidos genocidio y limpieza étnica.
La irrupción de las RSF en la ciudad, principal bastión de las Fuerzas Armadas en Darfur y sometida a un cruento cerco durante cerca de 18 meses, se ha visto acompañada por ejecuciones sumarias, violaciones, saqueos y secuestros, entre otras violaciones del Derecho Internacional, algunos de ellos emitidos a través de Internet por los propios responsables.
Los paramilitares, cabe recordar, han desmentido todas las acusaciones de atrocidades vertidas contra ellos y este mismo sábado han publicado en la plataforma Telegram un nuevo vídeo en el que muestras imágenes de la reapertura del hospital Al Saudi de la ciudad para que los civiles reciban atención médica.
