
El Gobierno de Ucrania ha decidido este martes rescindir los poderes del Consejo de Supervisión de la empresa estatal de energía atómica, Energoatom, en el marco de la investigación por blanqueo de capitales desde una de sus oficinas en la capital, Kiev, que fue registrada a principios de esta semana por las autoridades.
«Hoy se han tomado las primeras decisiones para relanzar Energoatom. El Gobierno ha suspendido anticipadamente las funciones del Consejo de Supervisión de la empresa», ha anunciado la primera ministra de Ucrania, Yulia Sviridenko, en un comunicado difundido a través de Telegram.
La dirigente ha explicado que este organismo «tiene toda la autoridad, desde el nombramiento de la dirección hasta el control de las actividades de la empresa» desde que en 2023, el Ejecutivo ucraniano iniciara una «reforma» del Consejo de Supervisión, seleccionando a sus miembros «mediante concurso». En este sentido, ha recalcado que Kiev «no interfirió en sus actividades», por lo que ha instado al órgano a «asumir la responsabilidad de la situación de la empresa».
Sviridenko ha señalado además que el Ministerio de Economía, Medio Ambiente y Agricultura presentará una nueva composición del Consejo de Supervisión al Gobierno, quien tendrá de plazo una semana para aprobar los nombramientos. El objetivo es, ha indicado, «reiniciar rápidamente la dirección, realizar una auditoría completa de la empresa y prestar toda la asistencia necesaria a las fuerzas del orden en la investigación de los posibles casos de corrupción».
Al hilo, la primera ministra ha anunciado que «se ha encargado al Servicio Estatal de Auditoría que realice una auditoría urgente de Energoatom, incluidas las adquisiciones», cuyos resultados espera «lo antes posible» para su remisión a las fuerzas del orden y a los organismos anticorrupción.
La Oficina Nacional Anticorrupción de Ucrania (NABU, por sus siglas en ucraniano) y la Fiscalía Especializada Anticorrupción (SAPO) anunciaron este lunes una operación a gran escala para investigar una trama de corrupción en el sector energético, en medio de las restricciones al suministro eléctrico tras los ataques rusos de los últimos días.
Según las dos entidades, una «organización criminal» blanqueaba dinero desde una oficina en Kiev, inmueble que pertenecía al exparlamentario y empresario ucraniano Andréi Derkach, que actualmente es senador ruso. Creen que «cerca de 100 millones de dólares (87 millones de euros) pasaron por este sistema de blanqueo».
