Bradford Smith, un padre de familia de Arizona, se hizo viral por estos días con un tuit en el que contó que es la tercera persona en el mundo en recibir un implante cerebral de Neuralink. Este chip, que se inserta en el cerebro, permite registrar los impulsos eléctricos del cerebro y transmitirlos a una computadora en forma inalámbrica, que los transforma en texto o comandos para controlar un dispositivo.
Más aún, según explicó es el primer paciente con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) y el primero en ser no verbal en el ensayo clínico de la empresa de Elon Musk.
I am the 3rd person in the world to receive the @Neuralink brain implant.
1st with ALS. 1st Nonverbal.
I am typing this with my brain. It is my primary communication.
Ask me anything! I will answer at least all verified users!
Thank you @elonmusk! pic.twitter.com/bxYO3SBfA2
— Bradford G Smith (Brad) (@ALScyborg) April 27, 2025
Gracias a esta innovadora tecnología y a la inteligencia artificial (IA), Smith, que está completamente paralizado y depende de un ventilador para respirar, ha recuperado una capacidad fundamental: la comunicación.
Tal como explicó en un video, antes del implante Smith utilizaba una computadora controlada por la mirada, una tecnología que él describe como “un milagro de la tecnología” pero también “frustrante”. Funcionaba mejor en cuartos oscuros, lo que lo hacía sentir como “básicamente Batman”. Ahora, Neuralink le permite salir al exterior e ignorar los cambios de luz.
Cómo funciona el implante de Neuralink
El implante, del tamaño de cinco monedas de veinticinco centavos de dólar apiladas, se colocó en su corteza motora, la parte del cerebro que controla el movimiento corporal.
Un robot insertó los hilos, que contienen 1024 electrodos, solo unos pocos milímetros en su cerebro, evitando vasos sanguíneos. Estos electrodos capturan las señales neuronales que la IA procesa en una computadora convencioanl para decodificar los movimientos intencionados y mover un cursor en la pantalla.
Smith aclara que Neuralink “no lee mis pensamientos más profundos o las palabras en las que pienso; simplemente lee cómo quiero moverme y mueve el cursor a donde quiero“.
Entrenar el sistema implicó descubrir los movimientos cerebrales que mejor se traducían en control. Inicialmente intentaron con las manos, pero el mejor resultado se obtuvo con el movimiento de la lengua para controlar el cursor y apretando la mandíbula para hacer clic.
Smith explica: “no estoy pensando activamente en mi lengua, así como vos no pensás en tu muñeca cuando movés un ratón… Simplemente pienso en mover el cursor“.
La tecnología ha mejorado enormemente su calidad de vida. Smith creó un teclado virtual y un teclado personalizado con atajos para tareas comunes como seleccionar, copiar, pegar, deshacer y navegar. También solicitó una función de “lugar de estacionamiento” para el cursor, que le permite detenerlo cuando solo quiere mirar o descansar.
Habla con su propia voz
Una de las aplicaciones más significativas es una app de chat que utiliza IA (incluido Grok 3) para escuchar conversaciones y sugerirle opciones de respuesta, generadas con un clon de IA de su antigua voz. Aunque no es perfecta, esta herramienta lo ayuda a responder más rápido, tal como explicó en el video que publicó: “Mi amigo me pidió ideas para su novia, que ama los caballos; elegí la opción que le decía, con mi voz, que le comprara un ramo de zanahorias… ¡qué idea tan creativa y divertida!”.
Brad resume el impacto de Neuralink: «me ha dado libertad, esperanza y una comunicación más rápida“ con el mundo. Aunque admite que el ELA que paraliza su cuerpo es un contratiempo fundamental, se centra en el panorama general. ”El panorama general es que soy feliz“.