Roma, 2 may (EFE).- La ministra española de Defensa, Margarita Robles, destacó este viernes el empeño de España en el mantenimiento de la seguridad en aguas mediterráneas y en el marco de la alianza atlántica, en una visita a la dotación de la fragata ‘Álvaro de Bazán’, integrada en la Agrupación Naval Permanente de la OTAN (SNMG-2), en el puerto de la ciudad italiana de Civitavecchia.
Robles subrayó «la importancia de las capacidades y el compromiso de España con la seguridad marítima en el Mediterráneo y la defensa colectiva de la Alianza», informó Defensa en un comunicado.
«Es un orgullo poder trasladarles el reconocimiento que merecen, porque por muchas mejoras y tecnologías que se implementen, hay algo que sólo ponen ustedes, que es la humanidad y una profesionalidad fuera de toda duda», declaró Robles, acompañada por el jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodoro López Calderón.
La dotación española, compuesta por 210 miembros, está a punto de acabar su misión como parte del SNMG-2, y durante seis meses se encargó de «asegurar la libertad de maniobra» a nivel mediterráneo.
Sus integrantes también estuvieron «preparados para ofrecer una primera respuesta en situaciones de crisis, sin olvidar la monitorización de embarcaciones, como el caso de un submarino ruso en la zona oriental del Mediterráneo».
Según el comandante de la embarcación, capitán de fragata Pablo Rodríguez Tortosa, «la ‘Álvaro de Bazán’ cuenta con las mejores capacidades de toda la marina europea, destacando la interoperabilidad entre los países participantes», en los que España «tiene una altísima valoración».
Las Agrupaciones Navales Permanentes de la OTAN ofrecen presencia marítima para disuasión, defensa colectiva y la comunicación estratégica, y entre sus zonas de operación está el Mediterráneo.
De acuerdo con Defensa, la fragata cuenta también con un programa de apoyo psicológico desde hace casi dos años, con una psicóloga a bordo, un servicio que la tripulación consideró «tremendamente beneficioso».
«Permite no sólo apoyar en situ a la dotación, sino hacer un análisis y poder implementar mejores para implementar la vida a bordo», destaca el Ministerio.
Según concreta, el protocolo tiene tres puntos de seguimiento que se dividen entre el inicio, la mitad y el final de la misión, y que sirve para extraer datos «a través de cuestionarios que generan estadísticas en distintos ámbitos de afectación», como el sueño o las relaciones interpersonales.
Asimismo, la fragata cuenta también con un médico y un enfermero centrados en la atención sanitaria a la tripulación del barco. EFE
(foto) (vídeo)
