Dos personas vinculadas a una red transnacional de narcotráfico y lavado de activos fueron capturadas en Cali, Colombia, en una operación conjunta entre la Policía Nacional de Colombia y la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA).
Según informó el ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, los detenidos, identificados como Camilo Esteban Betancourt Rosero, alias Max, y Laura Gutiérrez, alias Chola, son requeridos en extradición por Estados Unidos debido a su presunta participación en actividades ilícitas relacionadas con estas operaciones.
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De acuerdo con las autoridades, los capturados formarían parte de una organización criminal conocida como Black, que opera principalmente en la región del Pacífico colombiano.
Este grupo mantiene vínculos con la Coordinadora Guerrillera del Pacífico, una estructura delictiva que actúa en el departamento de Nariño.
Según las investigaciones, la organización Black estaría involucrada en el tráfico de drogas hacia Estados Unidos, México y diversos países de Centroamérica, utilizando métodos como el empleo de semisumergibles para el transporte de estupefacientes.
Además, las autoridades han señalado que esta red se dedica al lavado de dinero proveniente del narcotráfico.
Alias Max, señalado como uno de los líderes de la organización, era considerado el principal responsable del blanqueo de capitales, con un estimado de más de 44 millones de dólares anuales.
Este monto refleja la magnitud de las operaciones financieras ilícitas de la red, que buscaba ocultar las ganancias provenientes del tráfico de drogas mediante complejas estrategias de lavado de dinero.
Según publicó la Policía Nacional, estas acciones forman parte de los esfuerzos continuos por desmantelar las redes del narcotráfico y debilitar sus estructuras económicas.
El ministro Pedro Sánchez, en un comunicado oficial, reafirmó el compromiso del Gobierno colombiano con la seguridad de los ciudadanos y subrayó que “en Colombia el crimen no paga”.
Además, destacó que la captura de estos individuos fue posible gracias a la cooperación internacional y al uso de estrategias contundentes para combatir el crimen organizado.
Las investigaciones también han vinculado a Betancourt Rosero con la compra de armamento y la construcción de submarinos artesanales, utilizados para facilitar el transporte de drogas.
Alias Max y su relación con el cabecilla Allende Perilla
Alias Max ha sido identificado como socio de Allende Perilla, un miembro de la Segunda Marquetalia, grupo disidente de las Farc.
Perilla, que participó en los diálogos de paz en Colombia, fue acusado de controlar rutas de tráfico de drogas en el Pacífico, específicamente entre Colombia y Ecuador, y de colaborar con el Cártel de Sinaloa para el envío de estupefacientes hacia Estados Unidos y Europa.
Cabe mencionar que la captura de Perilla fue suspendida en Colombia por orden de la Fiscalía.
En diciembre de 2024, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac), anunció sanciones contra Camilo Esteban Betancourt Rosero, señalado de lavar dinero proveniente del tráfico de cocaína para la organización de Allende Perilla Sandoval.
Según informó la Ofac, Betancourt facilitó la conexión entre Allende y otros colaboradores, permitiendo la ejecución de proyectos de narcotráfico y la coordinación de operaciones desde Colombia hasta Costa Rica.
Su papel en el manejo de recursos financieros ilícitos ha sido clave para sostener estas actividades delictivas.
Las sanciones contra Betancourt Rosero forman parte de una medida más amplia bajo la Ley de Designación de Capos Extranjeros de Narcóticos y la Orden Ejecutiva 14059, que buscan debilitar las operaciones de una de las organizaciones criminales más poderosas de Colombia: el Clan del Golfo.
Junto a Betancourt, fueron sancionados Orozman Orlando Osten Blanco, Elkin Casarrubia Posada y Luis Pérez Castañeda, todos con posiciones de liderazgo dentro del Clan. Osten Blanco y Casarrubia Posada supervisan áreas estratégicas controladas por la organización, mientras que Pérez Castañeda actúa como director de política, promoviendo al Clan como una organización armada con fines políticos.
Las autoridades no han revelado detalles adicionales sobre el proceso de extradición de los capturados, pero se espera que sean entregados a las autoridades estadounidenses para enfrentar cargos relacionados con el narcotráfico y el lavado de activos.