La Finalissima, el partido a disputarse entre los campeones de la Copa América y la Eurocopa 2024, es aclamada por todos los fanáticos del fútbol. La selección argentina y España, dos de los seleccionados con mejor presente desde hace mucho tiempo, deben enfrentarse en un terreno neutral para dirimir al nuevo campeón intercontinental, en la previa de la próxima Copa del Mundo del año próximo que re realizará en Estados Unidos, México y Canadá.
Todo indica que se disputaría en el primer semestre del 2026. Sin embargo, aún no hay fecha definida ni certezas sobre la realización del “torneo”. El desarrollo del encuentro dependerá, en gran parte, de la buena predisposición de ambos planteles, que únicamente podrían jugar en marzo por conflictos con los calendarios.
El equipo dirigido por Lionel Scaloni se clasificó tras conquistar la Copa América por segunda vez consecutiva y 16ª en total el año pasado, al derrotar a Colombia 1 a 0 con gol de Lautaro Martínez en el Hard Rock Stadium de Miami, Estados Unidos. La Furia Roja, por su parte, hizo lo propio tras celebrar por cuarta ocasión en la Eurocopa Alemania 2024 con una victoria por 2 a 1 sobre Inglaterra, que quedó como subcampeona por segunda edición consecutiva, en el estadio Olímpico de Berlín.
La Finalissima en cuestión será la segunda edición de la renovada final que reemplazó a la Copa Artemio Franchi, nombrada así en honor al ex presidente de la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA) entre 1972 y 1983. Al igual que en 2022, cuando el conjunto albiceleste goleó por 3 a 0 a Italia en el mítico Wembley de Londres, Inglaterra, el compromiso sería en un estadio neutral, aunque la sede no está definida.
Su predecesora, la Copa Artemio Franchi, tuvo apenas dos ediciones en 1985 y 1993.En la primera, el 21 de agosto de 1985, Uruguay y Francia se enfrentaron en el Parque de los Príncipes de París y el trofeo se lo quedó el local tras ganar por 2 a 0 con goles de Dominique Rocheteau y José Touré.
En 1993, en tanto, se vieron las caras la Argentina y Dinamarca. El partido se disputó en el estadio José María Minella de Mar del Plata el 24 de febrero y finalizó 1 a 1 por los tantos de Néstor Craviotto, en contra, y Claudio Caniggia. Sin embargo, el conjunto albiceleste se quedó con la victoria por penales y fue el último título de Diego Armando Maradona con la selección argentina.
La lógica indica que la próxima edición debería ser en América porque la anterior edición se llevó a cabo en el Viejo Continente. La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) quiere llevarla a Estados Unidos a pesar de la resistencia de la UEFA para que no salga de su territorio. Aunque todavía no hay decisión, la opción del país norteamericano gana adeptos teniendo en cuenta que el encuentro se disputará en la antesala del Mundial.