Las mascotas cada vez ocupan un lugar más importante en la vida de las personas. Brindan cariño, compañía, lealtad y el contacto con ellos tiene grandes beneficios para la salud humana. A medida que crecen, surge una incógnita para la mayoría de los dueños: ¿cuándo comienza su vejez? Según el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH), los felinos considerados como “maduros” o “de mediana edad” empiezan a envejecer entre los 7 y los 10 años.
Sin embargo, se destaca que “la velocidad a la que un gato individual exhibe signos de envejecimiento puede estar influenciada por la raza, la composición genética, la exposición a lesiones y enfermedades, el entorno físico, el estrés y el estado nutricional”. Esto quiere decir que un gato adulto rescatado de la calle no va a envejecer de la misma forma que otro adoptado que estuvo bien cuidado desde su nacimiento.
Lo que sucede es que, con buen cuidado, alimentación y cariño, pueden llegar a vivir hasta los 15 o 20 años. Aunque cada animal debe evaluarse como individuo, existe una clasificación etaria. Como ya mencionamos anteriormente, se llaman “maduros” o “de mediana edad” a los que tienen entre 7 y 10 años; “señores” a los que tienen entre 11 y 14 años; y por último, “geriátricos” a los que poseen más de 15 años.
Es importante mencionar que llevar al veterinario a la mascota de forma continua y hacerle los correspondientes chequeos es esencial para evaluar la salud de los pacientes mayores y así poder orientar a los dueños sobre en el caso de que sea necesario. La capacidad natural de producir una respuesta inmune adecuada ante una infección tiende a disminuir con la edad, lo cual expone al gato a más riesgos de contraer enfermedades.
Signos de envejecimiento en un gato
De acuerdo a la información brindada por Royal Canin, existen conductas que pueden indicar que el animal ingresó a la vejez. Hay algunos procesos comunes que atraviesan todos ellos, pero es relevante aclarar que cada individuo es distinto, por lo que puede que no presente todos los signos.
- Comen menos.
- Problemas dentales, como deterioro de las piezas dentales y enfermedad de las encías, o bien pérdida de dientes.
- Pérdida de peso.
- Disminución de la flexibilidad.
- Dolores y problemas de movilidad.
- No se pueden limpiar adecuadamente, lo que a su vez termina afectando su pelaje y su piel.
- Pelaje más blanco y con menos brillo.
- Conductas alteradas, como retraimiento o hacer ruidos en momentos fuera de lo habitual (por ejemplo durante la noche).
- Duermen más.
¿Cómo saber si el gato está enfermo?
Muchas veces puede suceder que los signos que corresponden a un gato maduro o que entró a la vejez, son muy parecidos a aquellos que denotan que la mascota está enferma. Por eso, es importante tener en cuenta lo siguiente:
- Pérdida de apetito o peso: puede indicar un problema digestivo.
- Aumento de la micción o sed: posiblemente una señal de alteraciones urinarias.
- Rigidez o dificultad para levantarse: pueden ser consecuencia de una artritis.
- Aspecto desorientado, ansioso o conductas inusuales: pueden ser indicio de que está enfermo.