Este miércoles, en Japón, en el marco del torneo de sumo llamado Natsu Basho, el competidor Ura Kazuki venció a Takayasu Akira en una contienda marcada por una particularidad: la técnica que empleó el nipón para derribar a su oponente y así marcar un hito en la historia de este deporte. Tal es así que se usó seis veces en los últimos 25 años, según informaron los medios japoneses.
Desde el vamos, las reglas del sumo son sencillas de comprender. Aquel luchador que toque el suelo con alguna parte de su cuerpo -excluyendo los pies- queda eliminado. También es descalificado si se hace contacto con el exterior del dohyō, el espacio donde compiten.
Vestido con un mawashi de color rosa, Ura Kazuki consiguió doblegar a su rival con una técnica conocida como tsutae-zori, que permite derribar al oponente agarrándolo bajo el brazo.
En un combate que duró apenas 33 segundos, Kazuki comenzó a medir a Takayasu Akira, quien era el favorito del público y el que tomó la iniciativa para derribarlo. A medida que el tiempo transcurría, el deportista jamás se salió del eje y siguió a la perfección su estrategia de colocar su cuerpo por debajo de su brazo y ejercer una suerte de palanca para tirarlo hacia atrás.
El tsutae-zori como técnica está más asociada a la lucha libre que al sumo, por ende, el movimiento que realizó Kazuki quedó en los libros de historia por la efectividad y el timming necesario para buscar el costado más débil de su oponente.
A pesar de la diferencia de peso y de contextura física, el oriundo de Osaka pulió al máximo su técnica para sorprender al público presente, quien estalló en un grito ensordecedor para demostrar su veneración al luchador.
Consumado el triunfo, la filmación del combate llegó rápidamente a las redes sociales y se destacó por el esteticismo de este movimiento que es muy poco usual en el sumo, a tal punto que se empleó en muy pocos combates a lo largo de la historia.
Quién es Ura Kazuki
Nacido en Osaka, Japón, hace 32 años, Ura Kazuki saltó a la fama en el año 2015 cuando hizo su debut profesional en este deporte donde impera la lucha cuerpo a cuerpo.
En su tierra natal, Kazuki recibió el mote de “rikishi” que significa “luchador” y hace gala de este mote al no darse por vencido en los combates que protagoniza. Su estilo está más orientado a los movimientos creativos, sin ser ampuloso.
Con una personalidad más asociada a brindar un show dentro del dohyō, el japonés deslumbró a propios y extraños en el combate contra Takayasu Akira al llevar a cabo una técnica pocas veces empleada, con un resultado letal.
Desde sus inicios, el nipón siempre estuvo vinculado al sumo, a tal punto de ser parte de la Universidad Kwansei Gakuin, donde muchos deportistas hacen sus primeras armas en el deporte y logran trascender.