Zaragoza, 23 may (EFE).- Gabi Fernández, entrenador del Real Zaragoza, pese a haber vivido como jugador zaragocista el riesgo de descenso en dos temporadas, aunque entonces era en Primera división, ha reconocido que desde el banquillo lo está sufriendo «mucho más».
«Lo he sufrido mucho más. Me está quitando años de vida, pero estoy contento de estar aquí y poder ayudar», ha dicho en su comparecencia tras el entrenamiento matinal en el estadio de La Romareda antes del partido de este domingo contra el Deportivo.
También ha dejado claro que cuando llegó el pasado mes de marzo a falta de once partidos y en una dinámica muy negativa, «hubiese firmado esta situación», depender de si mismo a falta de dos partidos con cuatro puntos de ventaja y ganando este domingo cerrar la permanencia.
Sobre la trascendencia del partido contra el Depor, ha comentado que «más allá de la carga emocional de lo que significa estar dos meses trabajando para logar permanencia matemática y que el domingo es la primera oportunidad, el equipo lo está dando todo y no se puede pedir más».
«Nos hemos ganado el derecho a depender de nosotros y poder despedir La Romareda con una victoria. He tratado de quitarles la presión mediática que hay y sin sobrecoste añadido», ha apuntado.
El hecho de que los coruñeses no se jueguen nada, en su opinión, «nunca se sabe si es mejor», pero que aún así prefiere que no se jueguen nada, aunque lo harán con profesionalidad, porque «en esa relajación de no jugarte nada podemos encontrar la ventaja».
Sin restarle importancia al partido, Gabi ha negado que sea el más trascendental de su carrera: «Tenemos dos oportunidades, pero es muy importante».
Gabi cree que el partido será muy parecido al que jugaron hace dos semanas contra el Cartagena en el que deberán demostrar que se juegan el «futuro y que ellos ya han hecho los deberes».
Por eso, el madrileño quiere que su equipo en el campo sea «protagonista y sea capaz de dominar el nerviosismo aunque no llegue el gol pronto».
«El Deportivo es un equipo con calidad y jóvenes con mucho talento», ha considerado Gabi, que además ha indicarlo que para superarlo deberán mostrar «capacidad y personalidad de tener el balón y que los jugadores no se escondan»: «Dar el último pase que nos esta costando y que seamos verticales dominando el juego desde el balón».
El madrileño ha valorado el comportamiento de la afición desde que llegó porque en aquel momento «parecía que daba miedo jugar en casa» y en estos partidos «ha dado ejemplo de lo que es un club y sentir los colores». «Entendiendo que sin ellos no sería lo mismo. Espero que entre todos lo saquemos adelante», ha señalado.
Sobre los jugadores que arrastran algún problema físico, como Lluis López, Dani Tasende y Kervin Arriaga, ha comentado que durante la semana han intentado adaptar la situación de cada jugador para que pueda estar en condiciones de jugar y ha señalado que los dos últimos es «posible» que puedan jugar, mientras que en el caso de López lo ve complicado. EFE