El diseñador apuntó duramente contra la cantante, cuestionando su talento y su conducta en el escenario. Sus dichos se dan en un contexto de hostigamiento que comenzó con las críticas de Javier Milei.
Lali Espósito volvió a estar en el centro de la polémica, esta vez por los duros dichos de Roberto Piazza, quien no se guardó nada al opinar sobre la artista en una entrevista con la TV Pública.
“No la soporto, no tiene talento ni inteligencia. Es linda, nada más. No me gusta lo que opina y no me gusta que se chape a los pendejos arriba del escenario”, lanzó el diseñador con crudeza, sumándose así a una ola de ataques hacia la cantante que comenzó con fuertes críticas del presidente Javier Milei.
Las declaraciones de Piazza no solo sorprendieron por el tono agresivo, sino que se dieron en un contexto particular: Lali viene siendo blanco de críticas sistemáticas desde que manifestó su rechazo al modelo político que representa Milei. En plena campaña electoral, la artista había compartido mensajes defendiendo el rol del Estado en la cultura y en la educación pública, lo que la convirtió en objeto de burlas, insultos y descalificaciones por parte de varios sectores libertarios.
El propio Milei la mencionó en distintas oportunidades, incluso en entrevistas y tuits, acusándola de «vivir del Estado» y atacando su compromiso político. Lejos de callarse, Lali eligió responder con elegancia, defendiendo sus ideas y el valor de la cultura nacional, aunque también expresó su hartazgo por la violencia que recibió en redes.
A partir de entonces, la figura de Lali se volvió una especie de símbolo incómodo para ciertos referentes del oficialismo, que encontraron en ella una voz crítica con llegada masiva, especialmente entre los jóvenes. Su exposición mediática y sus opiniones públicas la posicionaron en un lugar que incomoda a los que desprecian el arte con mensaje político o social.
En este marco, las palabras de Piazza no hacen más que reforzar esa línea de hostigamiento. Si bien el diseñador es conocido por su lengua filosa y por no tener filtro a la hora de opinar sobre colegas del espectáculo, su ataque a Lali no pasó desapercibido. Usuarios de redes sociales señalaron que sus dichos no solo fueron misóginos y ofensivos, sino que también se suman a una campaña de desprestigio contra una artista que ha demostrado talento, trabajo y coherencia a lo largo de toda su carrera.