El Gobierno ya puso en marcha la tercera etapa como para cumplir la promesa de entregar 9000 kilómetros de ruta a manos privada. Hasta ahora hubo dos llamados que completaban alrededor de 5000 kilómetros. Hoy, mediante una decisión de Vialidad Nacional, puso en marcha el proceso para concesionar el resto de los corredores ubicados desde el Centro hacia el Norte del país.
El acto formal es un llamado a audiencias públicas para los tramos denominados Centro, Mesopotámico, Centro Norte, Noroeste, Litoral, Noreste, Chaco, Santa Fe y Cuyo. Se sumó así a los llamados Tramo Sur, Portuario Sur, Porturario Norte, Atlántico, Pampa, Mediterráneo y Puntano, todos ya con los prepliegos de licitación publicados, a la licitación en marcha para explotar la ruta del Mercosur, antes en manos de Caminos del Río Uruguay (Crusa), estatizada a principios de abril después de que finalizara el contrato sin que se llegue a concesionar a tiempo.
Esta vez, como se dijo, es el primer paso. Las audiencias, que se realizarán desde el 30 de junio hasta el 7 de julio próximo, se han tornado un requisito formal al punto que celebran antes de que esté el proyecto concreto de cómo será la explotación. De hecho, en febrero, aun antes de que se publiquen los pliegos, se llevó adelante la audiencia de la ruta del Mercosur, 12 y 14.
Por ahora, lo que se publicó para debatir en estos actos formales es un compendio de obviedades que nada dicen respecto de la infraestructura que se prevé construir, el financiamiento, el precio del peaje y menos aún, el destino de los empleados que prestan servicio ahora en esos tramos de rutas, pero que pertenecen a la empresa estatal Corredores Viales.
A modo de ejemplo, el tramo Centro, que tiene una extensión de 679 kilómetros, incluye segmentos de la ruta 9 (desde Rosario hasta cerca de Córdoba); la 19 (Santo Tomé hasta el límite con Córdoba) y la ruta 34 (desde Rosario hasta el Empalme con la 19). Respecto de este sistema clave de rutas, el llamado a audiencia dice que “es un eje vial, es clave para el transporte de bienes agroindustriales, conectando zonas de alta producción agrícola y ganadera con polos industriales como Córdoba y Rosario, y con puertos de exportación en el Paraná. Además, articula ciudades intermedias con fuerte identidad regional y tradiciones compartidas, promoviendo el intercambio y la cohesión entre provincias con raíces históricas comunes”.
Agrega que, además, es el acceso a diversos atractivos como las sierras cordobesas, los espacios culturales de Rosario y Santa Fe, y varios pueblos con valor patrimonial. “Este corredor soporta un alto flujo vehicular —especialmente de carga pesada— y requiere una infraestructura moderna y segura, siendo clave para la logística nacional e internacional dentro del Mercosur. Además, Impulsa el desarrollo económico, sino que también fortalece la integración territorial y cultural del centro argentino».
El párrafo que este cronista transcribió prácticamente textual, no es más que una costura de palabra obvias, redundantes, conocidas e inútiles a la hora de debatir sobre la infraestructura de un corredor vial determinante para el desafío logístico argentino. Tan falto de precisiones es el texto que corresponden a este corredor (todos tienen uno similar) que hasta parece la respuesta automática de una página de Inteligencia Artificial (IA).
En síntesis, el Gobierno llamó a debatir nada concreto de ocho tramos. Además del Centro, en la resolución también enumera los siguientes corredores.
Tramo Mesopotámico (342,82 kilómetros). Está compuesto por la ruta nacional 18 (entre Paraná y Puerto Yeruá); la 12 (entre Crespo y Paraná), y la A-012 (en el anillo perimetral de Rosario).
Tramo Centro Norte, (536,43 kilómetros). Abarca la ruta 34, que se extiende desde su empalme con la 19 hasta su conexión con la ruta provincial 5, en La Banda, Santiago del Estero.
Tramo Noroeste (596,52 kilómetros). Integra segmentos de la ruta 9 (entre Santiago del Estero y Salta, y otro tramo entre San Salvador de Jujuy y Yala); la 34 (cerca de la conexión con la 9 y el Acceso a San Pedro de Jujuy); la ruta 66 y la A-016 (en San Miguel de Tucumán).
Tramo Litoral (546,74 kilómetros). Corre sobre la ruta 12 (entre 9 de Julio y su empalme con la ruta 118 en Corrientes) y la ruta 16 (desde el Acceso al Viaducto del Puente General Belgrano hasta Avia Terai en Chaco).
Así las cosas, empieza a debatirse en audiencias públicas el futuro de corredores claves para el tránsito de pasajeros y de carga. El llamado es apenas formal, ya que el Gobierno no desembolsa ningún plan concreto para poner sobre la mesa. Pero las formalidades hay que pasarlas, y de eso se trata lo que hace Vialidad por estas horas. Tachar el casillero de las audiencias públicas. Nada más.
Los tramos
Tramo Noreste: Su longitud total es de 456,22 km15. Se conforma por segmentos de la Ruta Nacional N° 12 (desde el empalme con la RN N° 118 hasta cerca del Puente Internacional Tancredo Neves, con un corte en Posadas) y la Ruta Nacional N° 105 (desde Posadas hasta su empalme con la RN N° 14 en Pindapoy)1617.
Tramo Chaco Santa Fe: Su longitud total es de 497,18 km18. Corresponde a un segmento de la Ruta Nacional N° 11, entre Nelson, Santa Fe, y su empalme con la Ruta Nacional N° 16 en Resistencia, Chaco1920.
Tramo Cuyo: Su longitud total es de 329,09 km21. Este tramo se compone de segmentos de la Ruta Nacional N° 7 (entre el límite San Luis/Mendoza y Palmira, y otro tramo desde el Empalme con la RN N° 40 en Mendoza hasta el Límite Internacional con Chile).