El pasado jueves 5 de junio marcó el estreno de ‘Chespirito: sin querer queriendo’, una bioserie basada en las memorias del icónico comediante mexicano Roberto Gómez Bolaños, disponible en la plataforma de streaming Max.
Este esperado proyecto ha generado gran expectativa entre los seguidores del creador de personajes emblemáticos como El Chavo del 8 y El Chapulín Colorado, pero también ha estado rodeado de controversias relacionadas con el uso de nombres e historias personales.
Una de ellas es su gran relación personal y profesional con quien fue su jefe durante décadas: Emilio Azcárraga Milmo. Aunque en la serie se oculta su nombre real e incluso su popular apodo, El Tigre Azcárraga, durante el primer episodio se muestra como Chespirito junto al el elenco de ‘La Vecindad’ reciben de forma inesperada la llegada del ex dueño de Televisa para darles una gran sorpresa: El Chavo del 8 grabado desde Acapulco, el capítulo más recordado y querido por los fans del show.
‘El Tigre’ Azcárraga solo le permitía a Roberto Gómez Bolaños fumar dentro de Televisa
Sin embargo, esta escena también ventila uno de los privilegios exclusivos que tenía Roberto Gómez Bolaños en Televisa gracias al éxito que sus programas le generaban a El Tigre Azcárraga: poder fumar en los foros de San Ángel.
“Este señor es la única persona que tiene permiso para fumar dentro de los foros de mi empresa, con todo y su torpeza”, le dice el personaje que aún sin nombre deja de forma explicita saber que se trata de Emilio Azcárraga Milmo. “Bueno, no es torpeza, es comedia en potencia”, le contesta el protagonista que le da vida al comediante, el actor Pablo Cruz Guerrero.
El guiño aunque pasó desapercibido por algunos, por otros era más que esperado, pues en las grandes bioseries de estrellas mexicanas como Silvia Pinal, José José e incluso Luis Miguel, la aparición de El Tigre Azcárraga ha sido constate debido al gran poder que tenía el empresario y Televisa el siglo pasado en el país.
‘El Tigre’ Azcárraga le ofreció a Ramón Valdés el mismo privilegio dentro de Televisa
De la vida de Ramón Valdés, conocido cariñosamente como en México, Brasil y Latinoamérica como Don Ramón de El Chavo del 8, se rescatan historias que enaltecen su legado en la televisión y la comedia mexicana. Sin embargo, una muy particular referente a su envidiable amistad con El Tigre Azcárraga sigue generando ruido entre aquellos que fueron testigo de un privilegio exclusivo que el entonces dueño le dio a su querido empleado.
La relación entre Azcárraga y Valdés trascendió lo laboral; el empresario buscó siempre mostrar su aprecio por el actor. Un gesto que marcó su convivencia fue el privilegio exclusivo que otorgó a Ramón: la posibilidad de fumar dentro de las instalaciones de Televisa, incluso cuando en los años 80 se instituyó una estricta prohibición para todos los empleados.
Este beneficio reflejaba la estima que el entonces dueño tenía hacia el querido actor, quien, a diferencia de otros, disfrutaba de libertades singulares.
Sin embargo, este hábito del actor tuvo consecuencias para su salud. Según su nieto, Miguel Valdés, Ramón no buscaba fama ni fortuna; su personalidad humilde y auténtica lo enfocaba únicamente en aquello que lo apasionaba.
No obstante, el hecho de fumar frecuentemente, incluso en los sets de grabación, contribuyó al desarrollo de un cáncer de estómago que hizo metástasis en la médula espinal.