El Gobierno de Estados Unidos ha recalcado este martes que «mantiene una postura defensiva» en Oriente Próximo en medio del conflicto entre Israel e Irán, desatado el viernes tras los bombardeos israelíes contra el país centroasiático, y después de que Washington confirmara el envío de «capacidades adicionales» a la región.
«Las fuerzas estadounidenses mantienen su postura defensiva y eso no ha cambiado. Protegeremos a las tropas estadounidenses y nuestros intereses», ha manifestado el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, en su cuenta en la red social X, donde ha desmentido además especulaciones sobre la participación de Estados Unidos en los bombardeos contra Irán.
Así, Parnell ha respondido a un mensaje publicado por un usuario en referencia a informaciones de la cadena de televisión israelí Channel 14 sobre el papel activo de Estados Unidos en estos ataques para destacar que «no es cierto», algo que también ha hecho Alex Pfeiffer, subdirector de Comunicaciones de la Casa Blanca.
Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha confirmado que dio orden durante el fin de semana para «desplegar capacidades adicionales al área de responsabilidad del Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM)», que opera en Oriente Próximo, ante el recrudecimiento del conflicto entre Israel e Irán.
«Proteger a las fuerzas estadounidenses es nuestra principal prioridad y estos despliegues buscan reforzar nuestra postura defensiva en la región», ha sostenido Hegseth, quien ha recalcado además en declaraciones a la cadena de televisión estadounidense Fox News que Washington «está vigilante» y «está preparado».
En este sentido, ha argumentado que «lo que se está viendo en tiempo real es la paz a través de la fuerza y América Primero», al tiempo que ha insistido en que Estados Unidos «está posicionado de forma defensiva en la región para ser firme en la búsqueda de un acuerdo de paz». «Esperemos que sea lo que pase», ha zanjado.
Israel inició el pasado viernes una oleada de ataques contra instalaciones nucleares iraníes y zonas residenciales de la capital, Teherán. Las autoridades del país centroasiático han elevado el balance de víctimas desde entonces en más de 224 fallecidos y miles de heridos. Mientras, en Israel han muerto al menos 24 personas en ataques iraníes en represalia.
Los bombardeos de Israel tuvieron lugar días antes de la nueva ronda de negociaciones entre Washington y Teherán sobre el programa nuclear iraní, cuya celebración estaba prevista este domingo en la capital de Omán, Mascate, si bien las autoridades iraníes anunciaron su cancelación a causa de los ataques israelíes.