El próximo martes se conocerá al ganador de Gran Hermano. En lo que será la definición del reality que se emite por Telefe, cuatro candidatos persiguen dicho objetivo: Eugenia Ruíz, Ulises Apóstolo, Luz Tito y Santiago “Tato” Algorta.
Ante un eventual escenario de determinar un favorito, Santiago Algorta es el máximo candidato a conquistar el certamen televisivo. Como todo participante, su imagen en las redes es el ancho de espadas para medir fuerzas contra otros rivales.
Con 488 mil seguidores en su cuenta de Instagram, Tato es el participante que más usuarios lo siguen. Seguido de él, Luz, Ulises y Eugenia, en ese orden, son quienes más reúnen fuerzas en esta red social.
Tanto en Uruguay como en Argentina, Tato pisa fuerte y su propio público se encarga de armar videos de apoyo con banderas, carteles y un grito al unísono para proclamarlo ganador.
Este fenómeno popular, de gran dimensión, se gestó desde el principio del certamen cuando el 2 de diciembre, Santiago ingresó a la casa de Gran Hermano y empezó a entretejer estrategias para imponerse entre los otros concursantes, quienes lo miraron de reojo y se pusieron, en su mayoría, en la vereda de enfrente para intentar debilitarlo.
La similitud con Marcos y Bautista, los últimos ganadores de Gran Hermano
Marcos Ginocchio y Bautista Mascia conquistaron las últimas dos ediciones de Gran Hermano. A la hora de encontrar similitudes y diferencias, Tato mezcló la serenidad del primero y la templanza del último para fortalecer su carácter en los seis meses de aislamiento.
Otro dato a tener en cuenta es que Tato es oriundo de Uruguay como Bautista, quien tuvo una gran cantidad de seguidores a su lado a la hora de la definición. Esta estadística podría ser determinante para Santiago, quien mencionó en varias oportunidades a su coterráneo como un ejemplo inspirador.
Lo que resta definir es cómo será el camino de Tato una vez afuera del reality. Tanto Marcos como Bautista prefirieron acentuar su perfil bajo y se corrieron de las cámaras, sin tener una exposición tan marcada como otros “hermanitos”.
El camino de Tato en la casa
Desde el principio hasta el final, Santiago Algorta integró el reconocido grupo llamado el “Tridente” donde se hizo fuerte junto a Luz Tito -una de las finalistas- y Luciana Martínez. Tras la salida de esta última, quien tomó su lugar, de manera provisoria, fue Lucía Patrone, más conocida como “Luchi”.
Con una fuerte injerencia en la casa, Tato conquistó al público con su sencillez y personalidad reservada, aunque siempre dispuesta a la hora de afrontar los conflictos. De la mano de Luz y Luciana, conformaron un equipo inquebrantable, que siempre permaneció unido, aunque, de momentos, aislados del resto de los participantes que lo veían como una amenaza latente.
Uno de los grandes enemigos del concursante uruguayo fue Ulises Apóstolo, quien llegó junto a él a los últimos momentos del reality. Acusándolo de mentiroso, machista, entre otras cuestiones, el cordobés expuso a Tato al aire, mientras Santiago del Moro, conductor del programa, oficiaba de mediador para recomponer la relación.
Tras superar placas positivas y negativas, Tato comenzó a ganar confianza, agrandó su fandom y, en los últimos días, sintió el calor de su gente, quienes aguardan al día martes para saber si será el nuevo ganador de Gran Hermano.
