El servicio secreto israelí para el interior y los territorios palestinos, el Shin Bet, ha anunciado la detención de 60 presuntos miembros del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en los últimos tres meses y en Hebrón, Cisjordania, en la que consideran la operación más importante de la última década.
La operación, que ha contado con la colaboración de la Policía y de las Fuerzas Armadas, ha permitido desmantelar «una importante, compleja y amplia infraestructura de Hamás en Hebrón que «preparaba distintos tipos de atantados a corto plazo». Para ello disponían de armamento que ha sido incautado: 22 armas de fuego, once granadas y otras armas, así como una gran cantidad de munición.
Muchos de los detenidos habían estado ya presos, pero se dedicaban a reclutar, armar y formar a nuevos miembros de Hamás de la zona «para perpetrar ataques con armas de fuego y bombas contra objetivos israelíes».
«Esta es la operación más amplia y compleja del Shin Bet en Judea y Samaria (Cisjordania) en la última década», ha destacado un alto mando del Shin Bet. «Los miembros del grupo realizaban formación en armas, reunían información de inteligencia sobre objetivos israelíes, fabricaban material explosivo y montaban artefactos explosivos, todo con el objetivo de perpetrar atentados importantes en nombre de Hamás» en Cisjordania e Israel, ha relatado.
Algunos de los detenidos habrían participado en el ataque con armas de fuego de agosto de 2010 en el que murieron cuatro israelíes.