La Policía Nacional de España detuvo en Orihuela (Alicante) al hijo y presunto lugarteniente del líder de una organización criminal lituana vinculada con el mayor alijo de cocaína incautado en Europa: 16 toneladas aprehendidas en 2021 en el puerto de Hamburgo, Alemania.
La operación, coordinada a nivel internacional, permitió la detención de nueve personas: siete en Lituania, una en España y una en Irlanda, todos implicados en la introducción masiva de cocaína desde Suramérica (Colombia) y hachís desde Marruecos hacia Europa.
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Durante la operación se realizaron 25 registros en España, Lituania e Irlanda, que dejaron como resultado la incautación de siete armas de fuego, más de dos millones de euros en efectivo, cantidades de drogas, detectores de GPS (sistemas de posicionamiento global, por sus siglas en inglés), cinco vehículos de alta gama, documentación falsa y material informático.
España, y en particular regiones como Levante, Tarragona y Málaga, funcionaba como base auxiliar del grupo para la adquisición, almacenamiento y posterior distribución de grandes cantidades de hachís, cocaína y marihuana.
Los responsables utilizaban rutas logísticas sofisticadas, empleando vehículos de alta potencia y documentos falsos, y mantenían diversas bases en Irlanda y otros países para facilitar el tráfico internacional de drogas, señaló el portal español La Razón.
La conversación clave para poder esclarecer el millonario decomiso de droga en puerto de Hamburgo
Los investigadores accedieron a comunicaciones encriptadas de la organización, y permitió confirmar que sus miembros movían habitualmente entre cuatro y siete toneladas de cocaína al mes. Ellos mismos aludieron, en sus conversaciones, a la pérdida del gigantesco cargamento de 16 toneladas interceptado en Hamburgo.
El detenido en España era considerado por los agentes como una pieza clave en la estructura criminal, encargado de organizar muchos de los cargamentos e interlocutor habitual en las negociaciones.
Residía de manera discreta en Orihuela, siempre escoltado por guardaespaldas y movilizándose en vehículos de gran potencia para eludir la detección policial.
La investigación, judicializada en el Juzgado Central de Instrucción número cinco de la Audiencia Nacional, permitió identificar a los líderes y principales colaboradores de la red, estableciendo los vínculos operativos entre España y Lituania.
Las autoridades continúan analizando la documentación y efectos intervenidos y no descartan nuevas detenciones en el marco de este caso.
Operativo antidroga en Palma destapa red liderada por Pablo Campos Maya, el “Pablo Escobar español”
Ese mismo día la Policía Nacional de España realizó un operativo en el barrio de La Soledat, Palma de Mallorca, dirigido contra la red de venta de estupefacientes liderada por Pablo Campos Maya, conocido como el Pablo y considerado uno de los principales narcotraficantes españoles.
La operación dejó como saldo tres personas detenidas y permitió desmantelar un punto de venta donde se hallaron cocaína, marihuana, hachís, dinero en efectivo y cámaras de videovigilancia utilizadas para controlar la actividad ilícita.
Durante la intervención se encontraron elementos que muestran la admiración del líder local por el capo colombiano Pablo Escobar, entre ellos un mural con el rostro del exjefe del cartel de Medellín y la frase “plata o muerte”, símbolo que reproducía una de las amenazas icónicas del narcotráfico en Colombia.
El operativo involucró cerca de cincuenta agentes y el acordonamiento de tres viviendas utilizadas como puntos de distribución. Los sospechosos intentaron destruir evidencia durante la redada, lanzando droga al inodoro o prendiendo fuego a billetes y estupefacientes.
Pablo Campos Maya acumula más de tres décadas al frente del tráfico de drogas en Palma, reconvirtiendo el barrio de La Soledat en un centro neurálgico del consumo y distribución.
Su modo de operar se caracterizó por una red de familiares y allegados, la adquisición progresiva de viviendas clave y una estructura que permitía blindar la actividad ante los controles policiales.
En diferentes etapas, Campos Maya evitó la captura directa y recurrió a abogados de alto perfil en sus procesos, como Emilio Rodríguez Menéndez.
A pesar de varias condenas por narcotráfico, una fuga aprovechando un permiso penitenciario y cinco años oculto en Málaga, “el Pablo” mantuvo su influencia, nunca se desvinculó del negocio y llegó a transferir responsabilidades operativas a una nueva generación.
Mientras tanto, cumple condena en prisión tras admitir sus delitos, aunque se estima que, una vez en libertad, podría retomar su lugar en el barrio donde su figura sigue siendo respetada dentro de la comunidad.
La investigación, dirigida por la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) en coordinación con la Policía Judicial y otros cuerpos, sigue abierta.