A raíz del testimonio del exjugador de baloncesto Ricky Rubio en el programa de Jordi Évole en La Sexta, ‘Lo de Évole’, sincerándose sobre sus problemas de salud mental cuando estaba en la cima de su carrera y jugaba en la NBA, Pipi Estrada ha revelado el complicado momento anímico que atraviesa su ex Miriam Sánchez, alejada del foco mediático y luchando contra las adicciones y la depresión desde hace años.
El periodista, que mantuvo una relación de 7 años con la exactriz de cine para adultos y ganadora de ‘Supervivientes’, con la que tiene una hija adolescente en común, se ha sentado en el plató de ‘Y Ahora Sonsoles’ para dar la última hora del estado de Miriam.
«Las adicciones le siguen pasando factura. Eso pertenece ya al pasado pero de alguna manera hay ahí un remordimiento, una forma de mirar hacia atrás» ha asegurado, revelando que a pesar de que hace tiempo que no habla con ella, sí sabe que «se vale por sí misma, está en ese proceso de intentar salir adelante pero con la medicación es muy difícil». La medicación es una trampa, esto solo se soluciona afrontando. Al problema hay que darle la cara. Con la medicación no avanzas», ha apuntado emocionado, admitiendo que la delicada salud mental d la exconcursante de realities ha pasado factura a su hija.
«Yo defiendo a mi familia. Este es un país donde tenemos un porcentaje importante de personas con problemas de salud mental. El 30% en este país sufre de algún trastorno de salud mental, estamos hablando de 16 millones de ciudadanos. Es decir, uno de cada tres ciudadanos en este país tiene un problema de salud mental y eso pues vivimos una ansiedad continuada» ha explicado tras el programa ante los micrófonos de Europa Press, insistiendo en la importancia de acudir a un profesional: «Yo tengo un psicólogo. Si tú te rompes un brazo vas al traumatólogo, si tú tienes un problema digestivo vas al de digestivo, si tienes un problema de los ojos vas al oftalmólogo. Entonces yo creo que hay una estigmatización con respecto a esta enfermedad, hay miedo. Entonces lo que hay que hacer es superar el miedo, afrontarlo con naturalidad y afrontarlo cara a cara. Lo puedes gestionar mucho mejor».
Como persona cercana a alguien con un problema de salud mental, Pipi confiesa que la clave para gestionarlo es, en primer lugar, «con mucha paciencia, con mucho cariño y sobre todo no abandones. No invadas el espacio, pero tienes que estar pendiente. Hay personas que lo afrontan públicamente y hay personas que se hermetizan. Viven en un búnker… y hay que respetar su espacio».
«Miriam es muy entrañable, es una persona maravillosa. Hay muchas Miriams en este país y hay muchos familiares que también lo viven cerca. Por lo tanto, yo creo que lo que tenemos que hacer es empatizar, solidarizarnos y esa trinchera de cobardes que está en las redes sociales y desde el anonimato hacen mucho daño» añade, insistiendo en que se debe normalizar acudir a un psicólogo.
Sin entrar en detalles sobre cómo se encuentra su ex, el periodista ha respondido a la pregunta de si está medicada, y con ayuda psicológica o psiquiátrica, revelando que «ella se autogenera». «El problema de todo esto es la autoexigencia. Hay personas que se exigen tanto que cuando no llegan al objetivo es como si encontraran alguna frustración. La gestión emocional en cada persona es diferente y tenemos que aprender a gestionar eso. Porque hay una cosa que es muy importante, confundimos problemas con incomodidades. ¿Sabes lo que son problemas? Problema es aquello que no es recuperable. Y todo lo demás es una incomodidad que ya se solucionará de alguna manera» sentencia.
Y a su lado, apoyándola de manera incondicional, Pipi: «Hasta el final de nuestras vidas vamos a estar unidos de una forma u otra y, evidentemente, nos ayudamos mutuamente con lo que tenemos alrededor y lo único que hay que hacer es luchar, afrontar y, sobre todo, ser una persona donde realmente que no te dé miedo. Hay que combatir el miedo. El miedo es el mayor enemigo que tenemos ante estas situaciones».
«A mí me gustaría que ella hablara porque es una persona muy válida. Todavía mucho trabajo por realizar. Muchísimo trabajo, pero no sabéis, no sois conscientes de la sabiduría que hay ahí a todos los niveles, pero hay que respetar también el silencio de los demás. Es difícil, es complicado, pero no hay que arrojar la toalla. Y sobre todo, mientras estemos vivos, tenemos que afrontar las situaciones, las cosas, y sobre todo porque tenemos responsabilidades. Y esas responsabilidades hay que afrontarlas también» asegura.
Además, Pipi no ha dejado pasar la oportunidad de pronunciarse sobre el momento convulso que atraviesan las Campos tras la exclusiva en la que Carmen Borrego ataca a Alejandra Rubio asegurando que «le sobra todo el mundo».
«Cuando te expones y estás en el escaparate, pues juegas con un riesgo. Y tienes que pagar un peaje. Me refiero, por ejemplo, a Alejandra Rubio. ¿De qué se queja? Hija, ¿de qué te quejas, Carmen Borrego? ¿De qué te quejas, Terelu? ¿De qué os quejáis? Está la ex, está la actual, está la prima, está el sobrino, está la tía, está la madre, está el Espíritu Santo. Y luego, no, es que yo de esto tal, es que yo de esto tal. Vamos a ver, si tú te expones, hija, si tú te expones en una historia delante de una cárcel a reivindicar que, a reivindicar que, deja que reivindiquen los jueces, que reivindiquen la justicia. Vas ahí de qué, de heroína, de héroe. Te digo una cosa, que la familia es muy bonita y hay que defenderla y hay que protegerla. Pero así no se protege una familia. Así lo único que haces es un ridículo espantoso y luego, ay, es que yo esto. Chica, sé coherente. Lo que pasa que, bueno, es una familia donde la coherencia se cree en que es una flor» sentencia implacable.