Se fue de Bs. As. a París, vivió un amor de película y le revelaron una verdad incómoda: “Fiel al estilo francés”

admin

Anita llegó a Francia un 10 de enero, varios días antes del comienzo del semestre. Desde su facultad en Buenos Aires se había postulado con éxito para una oportunidad de estudios en el exterior, y como buena amante de París y el idioma del amor, no dudó en elegir a la tierra gala como el destino para su aventura.

En Argentina, aparte de cursar sus materias, vivía con sus padres y trabajaba medio tiempo para una marca de indumentaria casual muy reconocida en su época. Gracias a ello, había ahorrado lo suficiente como para vivir durante varios meses lejos de casa, con lo justo, pero con la certeza de que se podría dedicar al estudio y a disfrutar de la magia parisina. Llegó embriagada por la excitación de la novedad y fue muy bien recibida por sus compañeros de pasillo, todos alojados en la misma residencia estudiantil.

“Creo que ir a vivir a otro país como estudiante es una experiencia especial y espectacular”, asegura Anita. “Todo eso de la frialdad, de la dificultad de hacer amigos, de que solo te ves en los bares, creo que responde más a la experiencia de alguien que ya está en otra etapa de la vida, un poco más adulta, donde las amistades a donde llegás ya están formadas, así como las parejas y hasta las familias. Cuando llegás tan joven como era yo, que tenía 20, lo común es socializar, juntarse en las residencias ¡nadie tenía demasiada plata para salidas constantes! o en las casas de los padres, o parientes, si alguno vivía con su familia. De hecho, fue en una casa de familia donde lo conocí a Régis”.

París, un sueño que Anita traía desde chica.

El chico que todas miran

Régis la vio apenas ingresó a la casa de Lois, su amigo de toda la vida. Era una vivienda en las afueras de París, y Lois era de los pocos estudiantes que Anita había conocido que no venía de alguna otra provincia o país. Régis, supo casi de inmediato, había optado por realizar un estudio terciario, vivía en un departamento compartido y trabajaba en temas relacionados a servicios financieros: “Era tan atractivo”, recuerda Anita. “Creo que todas las chicas suspiraban por él, yo, con mi timidez, ni me acerqué”.

La segunda vez que vio a Régis fue en el departamento de este, en una fiesta que había organizado con sus compañeros de piso. Anita llegó gracias a Lois y otros nuevos amigos, y si bien volvió a sentir la atracción inicial, esta vez tampoco se animó a acercarse. Por otro lado, no quería ser una más del club de admiradoras, que evidentemente revoloteaban a su alrededor, y se resignó a pasar desapercibida.

En París, Anita hizo grandes amigas.

Sin embargo, para su sorpresa, una mano tocó su hombro y al darse vuelta lo vio a él, Régis, con su sonrisa encantadora y un trago en la mano: ¿Te puedo invitar uno?, le dijo. Gracias, respondió Anita con timidez y sin poder emitir esas líneas astutas de las series y películas, al estilo: `No sería una invitación, acá todos los tragos son gratis´.

Charlaron durante el resto de la noche, hasta que todos se fueron: “Eso sí fue como en las películas”, rememora ella. “Lo ayudé a ordenar y después se ofreció a acompañarme hasta la residencia. Cuando llegamos me besó. Yo caí rendida a sus pies”.

Te amo en Champ de Mars

Habían pasado tres semanas y media desde su llegada, y Anita no solo ya había forjado hermosas amistades, sino que estaba de novia. Régis era el chico ideal, la llevaba de paseo, la presentó con más amigos y familia, y junto a sus suegros, compartieron el cumpleaños de su hermana menor -la debilidad de Régis- y celebraron juntos los festejos tradicionales de Carnaval.

La coronación del idilio llegó una noche, bajo la luz de la luna, con un picnic que Régis improvisó en el Champ de Mars, y un `te amo´ que terminó de desarmar a la joven argentina.

“Estaba tan enamorada que me costaba focalizarme en los estudios”, admite Anita. “París se transformó en ese cuento romántico con el que soñaba y la verdad es que decidí que la experiencia más importante era esa, vivir el amor francés al borde del Sena. La facultad tomó un rol secundario”.

“París se transformó en ese cuento romántico con el que soñaba...

El clímax de la relación llegó en abril, con una primavera sublime para los ojos de Anita, que en su vida de estudiante y enamorada, sonreía cada día al ver los cafecitos franceses en auge, y por las noches se deleitaba con las salidas con su novio y amigos, rodeada del hechizo de las luces y la luminiscencia de la Torre Eiffel.

La magia, sin embargo, llegó a su fin cierto día de mayo, cuando apareció en escena Mia, una chica de Estados Unidos.

La intrusa de Estados Unidos y una revelación: “Fiel al estilo francés”

Cuando Mía llegó a una de las típicas fiestas de Régis, Lois y sus amigos, Anita notó de inmediato la incomodidad en su novio. Estaba inquieto y no podía parar de mirar a la nueva extranjera. En algún momento, él desapareció de su vista y lo halló en la cocina, conversando con ella. La joven argentina no se animó a acercarse, se dijo que no tenía por qué desconfiar ni parecer de esas novias posesivas: “Ahora me doy cuenta de que por no incomodarlo a él, evité el conflicto y me incomodé a mí misma”, reflexiona.

Algo cambió a partir de entonces, Régis puso las primeras excusas para no verse, y en las salidas que sí concretaron, se mostró menos cariñoso que de costumbre. Anita, por su lado, no se animaba a preguntarle qué pasaba.

Una nueva reunión de amigos se celebró cierto día de mayo, y allí estaba nuevamente ella, Mia. Fue entonces que su amiga, Marie, se acercó a Anita y le comentó: `Me enteré de que Mia vino de Estados Unidos el año pasado para un semestre universitario y que fue novia de Régis. Ahora no sé si está de visita. Lo que es evidente es que le gustan las chicas que vienen de lejos por tiempo limitado´.

Las palabras de Marie fueron como un puñal: “Fiel al estilo francés, directos, sin rodeos”, asegura Anita.

Para Anita, los últimos tiempos en París fueron agridulces.

La burbuja explota y lo que quedó del amor

El semestre de Anita en París estaba por llegar a su fin. Ella, profundamente enamorada, había soñado con un futuro con Régis. Imaginó volver a Buenos Aires y anunciarle al mundo entero que se iría a vivir a Francia. No tenía ningún motivo para no querer hacerlo: había pasado un tiempo maravilloso, con amigos increíbles, en una ciudad que surgió encantada para su vida como estudiante.

Pero su sueño parisino se pinchó como una pompa de jabón que vuela y crea destellos, pero poco dura. Así llegó el día en que Régis le dijo que quería cortar su relación, alegando que la distancia haría todo demasiado complicado y que él no estaba preparado para eso.

A Buenos Aires, Anita regresó con un sabor agridulce. Cuando el nuevo semestre francés comenzó, cierto día de octubre, la joven recibió un correo de Marie con una revelación: `¿A qué no sabés qué? Llegó una chica de Colombia y para Régis ahora es la nueva novia´.

“Esta historia de amor que viví me marcó fuerte. No solo por lo que me enamoré, sino por las enseñanzas que me dejó”, dice Anita hoy, mientras revive su experiencia. “Desde entonces sospecho de lo que va demasiado rápido y de quien te endulza demasiado los oídos. También entendí la importancia de hablar cuando algo incomoda, aunque esa parte me sigue costando”.

“Por fortuna, a pesar de volver con el corazón roto, sigo recordando mi experiencia en Francia como una de las mejores de mi vida. No por él, claro, por todo. Hasta hoy sigo conservando grandes amistades de entonces y, cuando puedo, vuelvo a París, una ciudad que nunca deja de tener magia”.

Si querés contarle tu historia a la Señorita Heart, escribile a [email protected]

Deja un comentario

Next Post

Álbum de viaje. Florencia Sosa, una de las CEOs más jóvenes del país, nos comparte sus coloridas fotos de su tour por India

Conocida como una de las CEO más jóvenes del país, Florencia Sosa (32) -catamarqueña–, dirige un grupo de empresas de servicios de salud con las que continúa el legado de su padre, Emilio Sosa, quien murió en 2018, y también es artífice de emprendimientos tecnológicos con fuerte impacto social, con […]
Álbum de viaje. Florencia Sosa, una de las CEOs más jóvenes del país, nos comparte sus coloridas fotos de su tour por India

NOTICIAS RELACIONADAS

error: Content is protected !!