CIUDAD DEL VATICANO.- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, llamó este viernes al papa León XIV un día después de que las fuerzas israelíes atacaran la Iglesia de la Sagrada Familia en la Franja de Gaza, la única parroquia católica del enclave, encabezada por el argentino Gabriel Romanelli, quien resultó herido en el bombardeo que mató a tres personas.
Según un comunicado de la Oficina de Prensa del Vaticano, durante la conversación, el Pontífice reiteró su llamamiento a que progresen las negociaciones que conduzcan a un alto el fuego y al fin de la guerra.
León XIV manifestó además su “preocupación ante la situación humanitaria dramática de la población de Gaza”, señaló la Santa Sede.
“El Santo Padre destacó la urgencia de proteger los lugares de culto y, en especial, a los fieles y a toda la población de Palestina e Israel”, añadió el comunicado.
Netanyahu anunció que Israel investiga el hecho y expresó que el país “lamenta profundamente” el bombardeo, que afirmó fue “un error”, igual que le había dicho este jueves al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El jueves, el ejército israelí atacó la Iglesia de la Sagrada Familia, y dejó al menos tres muertos y diez heridos, entre ellos el párroco, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, frecuente interlocutor del difunto papa Francisco, quien resultó herido en una pierna.
Sin mencionar a Israel, León XIV lamentó después el “ataque injustificable” contra la parroquia, ubicada en la ciudad de Gaza, principal centro urbano del enclave palestino, y prometió “hacer todo lo posible para evitar esta inútil masacre de inocentes”.
Simbólica visita
Los dos más altos dignatarios cristianos de Jerusalén, el patriarca latino católico, Pierbattista Pizzaballa, y su homólogo ortodoxo griego, Teófilo III, se desplazaron este viernes a la Franja de Gaza, para expresar la “preocupación pastoral compartida de las Iglesias de Tierra Santa”, según un comunicado del Patriarcado Latino de Jerusalén.
Los religiosos y sus delegaciones llegaron por la tarde a la Iglesia católica de la Sagrada Familia, que resultó dañada en el ataque.
La comitiva tenía previsto enviar también cientos de toneladas de ayuda alimentaria, suministros médicos y equipos a las familias en Gaza, según el patriarcado, que añadió que había “asegurado la evacuación” de los heridos en el ataque a hospitales fuera de Gaza.
“Su Santidad el papa León XIV llamó para expresar su cercanía, su afecto, sus oraciones, su apoyo y también su intención de hacer todo lo posible para lograr no solo un alto el fuego, sino también el fin de esta tragedia”, dijo Pizzaballa.
“En nombre del Patriarcado Latino, pero también de todas las Iglesias de Tierra Santa, queremos agradecer a Su Santidad esta cercanía, las oraciones que ya se nos habían asegurado previamente, y también le aseguramos, en nombre de toda la comunidad de Gaza, hermanos y hermanas, sacerdotes, religiosos y religiosas, nuestras oraciones y agradecimiento”, afirmó el cardenal italiano.
El ataque fue condenado por líderes mundiales y figuras religiosas, e incluso el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llamó a Netanyahu para expresarle su frustración.
Israel mostró su pesar por lo que describió como un error y dijo que estaba investigando lo ocurrido.
La visita de los líderes religiosos el viernes supuso una inusual entrada al territorio por parte de una delegación extranjera. A excepción del goteo de trabajadores humanitarios y de un pequeño número de palestinos que necesitan atención médica fuera del territorio, muy pocos han podido entrar o salir de Gaza desde el inicio de la última ofensiva de Israel en mayo.
En el momento del ataque, el complejo de la iglesia albergaba tanto a cristianos como a musulmanes, incluidos varios niños con discapacidad, según Fadel Naem, director interino del Hospital Al-Ahli, que recibió a los heridos.
La organización benéfica católica Caritas Jerusalén señaló que el conserje de la parroquia, de 60 años, y una mujer de 84 que recibía apoyo psicosocial dentro de una tienda del grupo en el complejo, murieron en el ataque.
Netanyahu declaró en un comunicado que Israel “lamenta profundamente que una munición perdida haya impactado en la Iglesia de la Sagrada Familia de Gaza”.
El ejército israelí apuntó que una evaluación inicial indicó que “fragmentos de un proyectil disparado durante un operativo en la zona impactaron en la iglesia por error”. La investigación sigue abierta, agregó.
Israel ha atacado repetidamente escuelas, refugios, hospitales y otros edificios civiles, acusando a los terroristas de Hamas de esconderse allí adentro y culpándolos por las muertes de civiles.
El grupo terrorista encabezó un feroz asalto a Israel el 7 de octubre de 2023 en el que mató a unas 1200 personas y tomaron a 250 como rehenes. La ofensiva de represalia de Israel se cobró la vida de más de 58.600 palestinos, según el Ministerio de Salud gazatí, en manos de Hamas. Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales consideran que sus cifras son el conteo más fiable de las bajas de guerra.
Agencias AFP, AP y ANSA