CÓRDOBA.- A las 21:17, el presidente Javier Milei subió al escenario por el costado. Alentaba a cantar con él “soy el león, soy el rey” y la sala que albergó a La Derecha Fest en la cuidad de Córdoba se convirtió en un coro. “Hemos hecho el mejor Gobierno de la historia argentina. Hasta que llegamos nosotros al poder, el mejor había sido el primero de Carlos Menem”, disparó a modo de presentación.

“Muchos se van a sorprender con los resultados de octubre”, advirtió Milei en tono de campaña. Y enseguida criticó las ideas de la izquierda que se instalan como “parásitos mentales”, dijo empleando el concepto de su “amigo” Axel Kaiser.

Milei criticó a los senadores que votaron el aumento del gasto por 2,8 puntos del PBI y apuntó a las “chicanas” de la “bruja traidora”, en referencia a Cristina Kirchner. “Es una inconsistencia. Si a cada una de nuestras necesidades le vamos a llamar derecho, es imposible porque los recursos son finitos. Esas ideas han hecho de que de ser uno de los países más ricos del mundo, nos mandaran a la B”.

El Presidente pidió a su hermana Karina Milei que se pusiera de pie y la elogió por los “logros políticos” de su gestión. Pareció referirse de ese modo al posicionamiento electoral de La Libertad Avanza, partido que encabeza la secretaria de la Presidencia.

A lo largo de su discurso, varias veces repasó la herencia recibida y enfatizó la velocidad de los logros de su administración. “Mandriles”, gritó en referencia a los que hablan de que el país se está endeudando. “El kirchnerismo es el movimiento político más endeudador de la historia argentina, son hipotecadores de futuro, inmorales, ladrones que están empezando a pagar. Somos el primer gobierno de la historia argentina que baja la deuda en US$ 50.000 millones en un año”, dijo, sin dar mayores precisiones.

Un Milei de cartón tamaño natural recibe a los asistentes a La Derecha Fest para la primera foto. Está acompañado por un Donald Trump, una Giorgia Meloni y un Nayib Bukele, separados a centímetros uno del otro. La gente llega y posa entre los líderes de utilería antes de entrar en un gran hall plagado de merchandising: libros, tazas, remeras y hasta “zapatos libertarios” a la venta, la contracara de los “zapatos justicialistas”, que son un clásico en esta provincia.

Con Javier Milei a la cabeza -está previsto que hable a las 21-, el oficialismo preparó una fiesta de la derecha, pero, sobre todo, el «evento más anti zurdos que jamás se hizo». Se trata de una celebración, pero con un espíritu de resistencia, de “batalla cultural” contra el socialismo que, pese a que los libertarios son Gobierno, definen como el enemigo a desbancar.

El encuentro, organizado por La Derecha Diario, es en el hotel Quorum y tiene una fuerte impronta religiosa, que le dieron desde el inicio tres pastores que fueron los primeros oradores.

Entre los expositores, uno de lo más esperados fue Daniel Parisini (conocido como el Gordo Dan), referente de las Fuerzas del Cielo, grupo que responde a Santiago Caputo y que el fin de semana salió perjudicado en el reparto de candidaturas para las elecciones bonaerenses. “Sin rencores por las listas. Todo bien”, dijo el Gordo Dan a LA NACION. Él llegó y se instaló en el salón VIP, al que solo accedían políticos y empresarios, cuyos nombres estaban en una lista que especificaba, en una columna, “Empresa/Cargo Político”.

Parisini habló después de las 19:30. Lo presentaron como “una de las grandes estrellas del movimiento libertario”. “Vamos vamos, me chupa la pija la opinión de los kukas”, empezó él, arengando al público mientras avanzaba hacia el escenario entre la gente como si fuera un boxeador que camina al ring. Leyó su discurso y se excusó “soy mejor tuitero que orador”. Criticó a los “kukardos”, habló de las “cavernas fascistas” de los zurdos “hijos de una gran puta” y celebró al Presidente por haber encontrado “la fórmula química”. Sin nombrarlo, se refirió a Alberto Fernández y deslizó que le pegaba a su mujer embarazada; del Congreso sostuvo que le “apunta al corazón del plan, al equilibrio fiscal”, en total sintonía con el discurso de Milei.

Después del Gordo Dan habló Nicolás Márquez, ideólogo libertario y biógrafo del Presidente. Subió al escenario con un tapado de cuero negro hasta abajo de las rodillas mientras sonaba “Tirá para arriba”. Saludó, presente entre el público, a la “tremenda y quilombera” Lilia Lemoine. “Mi diputada predilecta”, dijo. Hizo subir al escenario a la también diputada Celeste Ponce (de Córdoba) y pidió aplausos para Juliana Santillán.

Márquez dijo: “Estamos en guerra, no estamos en una democracia noruega. Estamos en un país anormal tratando de llegar a ser algún día normal. ¿Qué tenemos que hacer con nuestros enemigos? No podemos sentarnos a dialogar, salvo en alguna circunstancia en que no nos quede otra. Tenemos que exterminarlos políticamente. Por eso espero que para el segundo mandato de Milei haya un compañero de fórmula a la altura de las circunstancias”, dijo sin nombrar a Victoria Villarruel a quien le pidió que “imite a Milei” y renuncie a su dieta. “No te aferres como una cerda”, le reclamó. Le sugirió además que fuera candidata del dirigente nacionalista César Biondini y los definió como “los patrioteros que quieren recuperar Malvinas con un gomón”.

Mientras Márquez hablaba desde la platea escuchaba gritos con críticas al diputado nacional por Córdoba Gabriel Bornoroni y pedidos por otra libertaria de la provincia, Verónica Sikora. “No me metan en internas locales”, pidió Márquez.

Entre el público, el más celebrado, cuando apareció en el hall, fue otro ideólogo libertario, Agustín Laje, que para entrar al VIP debió escabullirse de un grupo de jóvenes con acento centroamericano que lo abrazaba y le pedía fotos.

En el auditorio la edad promedio de los asistentes está cerca de los 40 años. Hay más hombres que mujeres. Ellas, con ropa arreglada; ellos, en su mayoría de elegante sport y unos pocos, de traje.

Cuando Le Derecha Fest empezó a tomar clima, en medio del hall, un grupo de jóvenes -casi todos varones, autodenominados “Los culiadazos de Milei”- corearon: “Saquen los pingüinos del cajón / para que vean / a los pibes, cambiaron de idea / llevan la bandera que trajo el león”. Seguido por: “Tiene miedo / Llaryora tiene miedo”, dirigido al gobernador de Córdoba.

Las puertas se habían abierto cerca de las 16. A esa hora, los primeros grupos empezaron a recorrer el hall contiguo al lugar de los discursos, que comenzaron a las 17:20. Pese a que se trata de un acto organizado por un medio de comunicación y a que el orador principal es el Presidente, para los periodistas que se acreditaron se montó un “corralito” fuera de los salones, a la intemperie.

“No odiamos lo suficiente a los periodistas (y yo soy uno)” se titula el panel en el que hablaron Javier Negre, el español dueño de La Derecha Diario que inauguró hace unas semanas su edición cordobesa, la primera del interior del país, y el activista estadounidense Alex Bruesewitz.

La primera oradora de la jornada fue la pastora libertaria Evelyn Barroso, que habló frente a unas 1500 personas. “La familia debe educar a los hijos aunque las políticas progresistas de los últimos años hayan ido en contra de eso”, dijo en su presentación. “Estas no son ideas arcaicas”, advirtió. Su presentación fue anunciada junto con la del también pastor evangélico Rigoberto Hidalgo, oriundo de Costa Rica, que acaba de presentar su libro “El circo del ateísmo”. Mientras esperaba su turno, Hidalgo firmaba ejemplares de su obra.

Afuera, en el hall, agrupaciones diversas tienen espacios asignados. “Basta de casta y socialismo en Bomberos Voluntarios”, dice un gran banner blanco firmado por “Bomberos, un estilo de vida”. También cuenta con su stand la Fundación Faro, el think tank libertario encabezado por Laje que recauda fondos con el objetivo declarado de expandir la doctrina del Gobierno.

Hojas del Sur, una editorial que publica obras libertarias y que hoy promociona los libros de Laje, instaló como atracción una silla del estilo de la de Juego de Tronos, pero que en lugar de espadas lleva como respaldo motosierras. Los libertarios hacen fila para sentarse y sacarse fotos. Hojas del Sur, con obras a la venta hoy, dice que la fiesta incluye la “Primera Feria del Libro Libertaria”.

Lo que más se vendió, no obstante, fueron las tazas ($10.000) y las cajas de chocolates ($15.000).

La expectativa estuvo puesta todo el día en el discurso del Presidente, que se titula “La construcción del milagro” y según él mismo adelantó el X, apuntará contra el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.

Para el encuentro de hoy se vendieron unas 2500 entradas a $35.000 (más gastos de gestión), según informaron fuentes de la organización. Los veteranos de Malvinas, Fuerzas Armadas y de Seguridad entraban gratis. Sólo debían llenar un formulario que estaba en las redes o escribirles a los organizadores.

Los conductores son Erick Kammerath, el influencer libertario cordobés, sobrino segundo del exfuncionario Germán Kammerath y asesor en la Unicameral, y Eliana Cere, contadora libertaria.

Cere ofició de maestra de ceremonias en la primera parte del encuentro y, entre presentación y presentación hizo un aplaudido pronunciamiento contra el aborto.

También se anunció la presencia de bandas de música -que continuarán con sus shows hasta las 23, después de que Milei cierre el segmento de los discursos- y espacios de venta de comida y bebidas, que tienen largas filas para comprar.

“No apto para kukas. No apto para zurdos. No apto para progres. No apto para periodistas ensobrados”, fueron otras de las consignas del encuentro.

Primeros discursos

“Debemos dar la batalla cultural por cada una de nuestras familias”, dijo Barroso, que inauguró los discursos. “Tenemos que recuperar el valor, el don de cuidar. Nuestro cuerpo no está fallado. No vamos a permitir que nos borren y no vamos a permitir que a nuestras madres y abuelas que les digan que fueron inferiores por formar familia”, advirtió y la ovacionaron. Después, se tomó unos minutos para “honrar” al Presidente y pedir “bendiciones” para él y su equipo.

Después fue el turno del pastor Hidalgo, que también transmitió un mensaje bíblico, mientras recorría el escenario, con una pantalla gigante detrás de él que mostraba decenas y decenas de pájaros volando. Él hablaba a un lado y al otro del atril con movimientos frenéticos que captaban la atención del público. “No puedes relativizar lo que es ser mujer, ser hombre, ser una roca…“. Hablaba de “principio absoluto” y a la “voluntad suprema”.

Después habló Gabriel Ballerini, también pastor evangélico, que dijo que estaba “feliz de compartir con la derecha cristiana, conservadora” este acto. “La izquierda nace atea, nace anticristo. Celebro que empecemos un encuentro de derecha así. La izquierda es incompatible con el cristianismo”, apuntó y citó un texto del “apóstol Pablo” para referirse a la “militancia cristiana”.

La “adoración” de Trump

“Hola, Argentina”, abrió su presentación Alex Brusewitz, a quien presentan como el autor de la campaña digital de Donald Trump, que advirtió que era todo lo que podía decir en español y recurrió a una traductora para seguir. Sostuvo luego que Trump “adora” a los argentinos y se llevó un aluvión de aplausos. Después presentó a “su prometida”, Carolina, y en línea con quienes lo precedieron en el escenario, mencionó a Dios, a Jesucristo y a la familia. Como cada vez que algún orador lo hizo, el público aplaudió con entusiasmo. Luego abogó por la “prosperidad económica sin que se meta el Gobierno” y enfatizó, sobre Trump y Milei: “Son líderes con intereses comunes y enemigos comunes, como los zurdos que siempre nos están atacando”.

Detrás, la pantalla mostraba una bandera argentina y otra estadounidense.

Negre, el dueño de La Derecha Diario, hizo después su presentación. Dijo que había sido despedido de El Mundo, en Madrid, por influencia de Pedro Sánchez y presentó un relato sobre cómo armó su canal de Youtube. “No odiamos lo suficiente a los periodistas y yo soy periodista. Es gente que se vende por un sobre, corrupta”, enfatizó.