Luego de que se mediatizara el caso de Pablo Ghisoni, el médico que estuvo casi tres años preso tras haber sido denunciado falsamente por abuso sexual, el Foro de Estudios sobre la Administración de Justicia (FORES) expresó su preocupación por el aumento de casos donde el sistema judicial, especialmente el proceso penal, se utilizó como herramienta de presión en disputas familiares.
Por medio de un comunicado, la asociación advirtió sobre la existencia de profesionales del derecho y la salud mental que contribuyeron a impulsar o avalar denuncias falsas de abuso sexual infantil, aunque esta práctica fuera en contra de los principios éticos.
“Constituye una grave vulneración de derechos fundamentales y socava los pilares del Estado de Derecho”, denunciaron en el documento al que tuvo acceso Infobae. Por este motivo, instaron a las autoridades judiciales a reforzar los controles de legitimidad en los procesos penales que involucren causas en torno a regímenes de cuidado y de comunicación de los menores con sus padres.
En línea con esto, la entidad alertó sobre prácticas como el uso procesal de menores, la inducción de relatos en ámbitos periciales informales o sin control judicial suficiente, y la imposición de medidas cautelares sin pruebas sólidas ni garantías procesales. Asimismo, consideró que estas “deben ser objeto de condena institucional y revisión urgente por parte de los poderes del Estado”.
“Reiteramos que la protección del interés superior del niño obligación no solo moral, sino constitucional, requiere, precisamente, garantizar su derecho a la verdad“, remarcaron desde FORES al agregar que, no por ello, debería dejarse de lado el cuidado de la integridad emocional, el derecho a tener contacto con ambos padres y a no ser objeto de conflictos judiciales violentos o falsos.
Por este motivo, la asociación llamó a las autoridades judiciales a ejercer un control estricto sobre los procesos y a no convalidar denuncias sin sustento. También sugirió a los colegios profesionales iniciar sumarios ante conductas irregulares de abogados y peritos.
Respecto a la actuación del Ministerio Público, pidieron que investiguen tanto las denuncias como la eventual comisión de delitos por denuncias falsas o manipulación de menores. Por último, instó a los poderes nacionales y provinciales a promover reformas normativas para prevenir estas situaciones y proteger los derechos de los niños ante un uso indebido del sistema judicial.
Finalmente, desde FORES sentenciaron que a la hora de manipular a un menor de edad no habría diferencia entre omisión, complicidad o silencio. “El Poder Judicial y todos quienes, en sus respectivos roles, participan de los procesos, están llamados a actuar con firmeza y sin dilaciones”, concluyeron.
Caso Ghisoni: el trasfondo de una denuncia por abuso y la confesión de un hijo
La causa que involucra a Pablo Ghisoni comenzó en 2012, cuando su ex esposa lo denunció por presuntamente impedir el contacto de sus hijos con ella. Ese mismo año, el Tribunal de Familia N° 3 de Lomas de Zamora resolvió otorgar la custodia de los menores al padre, lo que provocó que la Policía retirara a los niños del domicilio materno.
En 2014, dos de los hijos denunciaron al médico por abuso sexual. Como consecuencia, regresaron al hogar materno, mientras que Francisco, el tercero de los hermanos, decidió permanecer junto a su padre, sin acompañar las acusaciones. También terminaría acusado de presunto abuso sexual en la misma causa.
Después de que se efectivizara la denuncia, la Justicia dispuso la detención del médico, quien estuvo más de dos años en una institución de salud mental antes de recibir prisión domiciliaria. A los tres años, recuperó la libertad, a la espera del juicio oral.
El debate oral se inició el 3 de agosto de 2023 en el Tribunal Oral Criminal N° 3 de Lomas de Zamora, compuesto por los jueces Marcelo Hugo Dellaure, Luis Miguel Gabián y Claudio José Fernández. Luego de un mes, el tribunal absolvió por unanimidad a Pablo Ghisoni y a su hijo Francisco, debido a la falta de acusación por parte del fiscal.
La absolución, sin embargo, fue apelada por la madre de los jóvenes, por lo que el expediente aún sigue abierto. En medio de este contexto, se viralizó un video de Tomás Ghisoni admitiendo que, cuando era adolescente, acusó falsamente a su padre, influido por su madre. “Estoy haciendo este video para contar algo que me costó años decir. Cuando era adolescente acusé falsamente a mi padre de algo gravísimo”, señaló Tomás en una grabación de cinco minutos.
El caso se mantiene en los medios a raíz de la difusión de este testimonio. Francisco contó en el Congreso que, pese a la absolución, la situación judicial no concluyó por la apelación de la denunciante. Pablo Ghisoni expresó su reacción al video de Tomás: “Perdí a dos de mis hijos por diez años y ese video me emocionó mucho. Él pudo entender la patología de la madre y lo que hizo”. No obstante, aseguró que tenía los brazos abiertos para revincularse con sus otros hijos.
Actualmente, la Fiscalía N° 1 de Lomas de Zamora, a cargo de Jorge Ariel Bettini, denunció a la ex esposa de Ghisoni, Andrea Vázquez, por haber manipulado a su propio y por presuntamente haber liderado una “asociación ilícita” de peritos que habrían recibido pagos para convalidar las acusaciones por abuso sexual.
Según explicaron fuentes oficiales a este medio, la mujer fue acusada por la “posible comisión de los delitos de falso testimonio calificado, instigación a la comisión del delito de falso testimonio y asociación ilícita”. Asimismo, sospecharon de la participación de más personas, agrupaciones y peritos que habrían contribuido a que la maniobra de la mujer llegara a la detención del padre de sus hijos y posterior juicio.