Un sargento primero de la Policía Federal Argentina que integró la División Custodia Presidencial baleó a un motochorro que, junto con un cómplice que logró escaparse, había asaltado a su pareja en la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere, partido de La Matanza. El hecho ocurrió este martes por la tarde, cuando el agente se encontraba de civil y franco de servicio.
El enfrentamiento se dio en la calle Montgolfier al 1600, a pocas cuadras de la avenida Luro, una zona con alta circulación de motos y frecuentes denuncias por robos. Según el parte difundido por la policía bonaerense, el sargento primero, de 54 años, estaba acompañado por su esposa, de 53, cuando ambos fueron interceptados por dos delincuentes armados que se movilizaban en una moto Honda XR.
Los asaltantes abordaron a la mujer y le arrebataron la cartera. En ese momento, el sargento se identificó como personal policial y extrajo su pistola Glock calibre 9 milímetros, un arma de uso personal que no forma parte de su equipamiento reglamentario. Según su testimonio, dio la voz de alto y disparó al menos una vez para repeler la agresión. Uno de los proyectiles impactó en la cabeza de uno de los ladrones, que cayó herido a unos 30 metros del lugar. El otro delincuente escapó con la cartera, que fue hallada minutos después por una vecina a unos 200 metros y entregada a efectivos de la policía bonaerense.
El sospechoso herido fue identificado como Emanuel González, de 27 años. Una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) lo trasladó al Hospital Paroissien, donde ingresó inconsciente y quedó internado en estado reservado. Fuentes judiciales confirmaron que González tiene antecedentes penales por robo en una causa que tramita en el departamento judicial de Vicente López. En tanto, la moto en la que se desplazaba no presentaba impedimentos legales.
La investigación quedó a cargo del fiscal Gastón Duplaa, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de La Matanza, quien dispuso el secuestro del arma utilizada por el agente, la realización de pericias balísticas y el análisis de dermotest para determinar si hubo más disparos. También se ordenó el relevamiento de cámaras de seguridad en la zona y la toma de declaraciones testimoniales, que aún no fueron incorporadas formalmente a la causa.
Hasta el momento, no se adoptó ningún temperamento judicial contra el sargento primero, ya que los elementos reunidos apuntan a un caso de legítima defensa. La causa fue caratulada como robo con arma, aunque no se descarta que pueda modificarse en función del avance de la investigación.
Algunos testigos señalaron que los motochorros ya habían sido vistos merodeando la zona en días anteriores. “Acá ya no se puede salir tranquilo. Es tierra de nadie”, dijo una vecina a un medio local.
Desde la Policía Federal Argentina no emitieron declaraciones oficiales, aunque confirmaron que el sargento prestó servicios en la División Custodia Presidencial y actualmente cumple funciones administrativas. El agente permanece a disposición de la Justicia y fue apartado preventivamente de sus tareas operativas mientras se tramita la investigación.
