El auge de las carreras “duras” en la Argentina tiene una doble justificación: salarios millonarios y una demanda que cada día crece más. Guillermo Oliveto, ingeniero industrial y decano de la Facultad Regional Buenos Aires de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), visitó los estudio de LN+ y aseguró que “las carreras más demandadas son las vinculadas a las ciencias duras como la informática y la electrónica“.
“Indudablemente la carrera más demandada es ingeniería en sistemas de información. En nuestra facultad tenemos 15.000 alumnos y más de 7.000 estudian eso», detalló Oliveto. “Después le siguen ingeniería industrial e ingeniería electrónica“, agregó.
Según Oliveto, “ya desde el segundo año, los estudiantes empiezan a ser demandados por el mercado laboral y avanzan en la carrera con trabajos consolidados en la especialidad”. “Y eso es muy bueno, porque adquieren experiencia y los mejora como profesionales de la ingeniería”, puntualizó.
“En el país, en general, la formación en ciencias duras no es buena y eso se nota”, apuntó el ingeniero industrial. Consultado sobre el cuadro de situación, manfiestó que “desde hace tiempo nosotros tenemos un curso de introducción a la facultad, apoyada por un aula virtual y por tutorías, con una pequeña diferencia: años atrás era para refrescar conocimientos del secundario. Hoy, tenemos que dictar determinados conocimientos del secundario”.
Respecto a los salarios, la escala en esos rubros va desde los $1.500.000 hasta los $8.000.000, y los estudiantes son solicitados tanto por empresas locales como internacionales.
En relación a las problemáticas de estudiar y trabajar al mismo tiempo, Oliveto dijo: “En promedio, estas carreras tienen una duración de cinco años. Luego, la ralentización de ese período, muchas veces está relacionado con el mercado laboral, y otro porcentaje, un poco menor, vinculado con la deserción o la escasa preparación: eso genera desmotivación».
Desde la óptica de Oliveto, “de todas formas eso no es tiempo perdido, ya que, a la larga, van a tener una carrera más sólida”.
Por último, el decano mencionó un proyecto que busca incentivar a más alumnos. “Se trata de una serie de programas de trayecto formativo en donde le armamos un camino al estudiante para que pueda recibir una certificación que le permite empleabilidad, y eso, al mismo tiempo, lo motive a continuar estudiando”, concluyó.