El Ministerio Público Fiscal pidió que Isaías José Suárez sea condenado a la pena de prisión perpetua. Se trata del hombre acusado de haber asesinado en una plaza de Palermo al ingeniero Mariano Barbieri. La víctima había sido padre dos meses antes del crimen.
Ante el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) porteño Nº11, integrado por los jueces Julio Pablo Quiñones, Julio López Casariego y Matías Buenaventura, el fiscal Nicolás Amelotti consideró a Suárez , de 31 años, autor del delito de homicidio agravado por haber sido perpetrado para consumar otro delito y para procurar la impunidad (criminis causa), según informó el sitio de noticias de la Procuración General de la Nación, www.fiscales.gob.ar.
El homicidio de Barbieri, que tenía 42 años, ocurrió el 30 de agosto de 2023 en la plaza Sicilia, en Palermo.
En su alegato, ante el tribunal, el representante del Ministerio Público sostuvo que el acusado conocía el riesgo que le estaba generando a la víctima al acuchillarlo en una zona vital.
“Frente a la resistencia, le asestó una puñalada certera en el tórax y lesionó el corazón de la víctima”, explicó Amelotti.
El representante del Ministerio Público recordó que la noche del crimen, Barbieri estaba en la plaza Sicilia, situada en el cruce de las avenidas Del Libertador y Sarmiento, en la zona de los Bosques de Palermo, cuando apareció el acusado para robarle su celular. La víctima se resistió, lo que generó que Suárez lo atacara con un cuchillo tipo tramontina.
Luego de la agresión, el imputado se dirigió hacia la avenida Berro y Casares, desde donde comenzó una caminata hacia el interior de la villa 31, en Retiro. Barbieri, por su parte, cruzó herido la avenida Del Libertador y llegó hasta una heladería. Allí pidió ayuda antes de desplomarse en el suelo. Finalmente, falleció pocas horas después, en el Hospital Fernández.
El cuchillo con el que atacaron a la víctima fue encontrado al día siguiente dentro en una nueva inspección en la plaza. Suárez fue detenido cinco días después dentro del Barrio 31 por la División Antidrogas Norte de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. La investigación del crimen estuvo a cargo del fiscal Marcelo Munilla Lacasa.
El fiscal Amelotti recordó que la noche del crimen, cuado fue atacado, Barbieri se mensajeaba con una amiga. El último registro del chat fue a las 22.38.
“Cinco minutos después, un hombre que paseaba a su perro llamó al número de emergencias 911 y contó que había presenciado un robo. Dio detalles del forcejeo y de cómo el ladrón había huido hacia la zona de Casares mientras la víctima se dirigía hacia avenida Del Libertador. El 31 de agosto de 2023, ese testigo declaró ante la División Homicidios de la Policía de la Ciudad y dio una descripción del atacante, al cual vio desde una distancia aproximada de 20 metros y en el momento en que estaba huyendo del lugar. Con esos datos, la División Apoyo Tecnológico de la fuerza de seguridad porteña comenzó con el análisis de cámaras y domos de la zona para ubicar a un hombre que tuviera características similares”, recordó el representante del Ministerio Público.
Se analizaron más 10.000 imágenes de cámaras de seguridad y se obtuvieron 34 capturas que coincidían con lo dicho por el testigo. Aseguró que las secuencias fueron descubriéndose a lo largo de los días y que para el 1º de septiembre de 2023 ya existía una imagen donde se veía al atacante en las inmediaciones de la plaza Sicilia.
El fiscal explicó cómo se logró probar que la persona sospechosa era Suárez. Contó que la División Homicidios de la Policía de la Ciudad le entregó la información y la imagen [del sospechoso] a la División Antidrogas Norte, que a su vez la derivó a los integrantes que realizaban tareas en la villa 31. “A través de la recolección de testimonios, pudieron ubicar que un hombre había ‘boqueado’ sobre lo sucedido y que había estado alardeando sobre el robo y sobre el ‘puntazo’ que le había propinado a la víctima. Al mostrarle la foto a las personas, coincidieron y dijeron que se trataba de Isaías Suárez”, afirmó el fiscal-
Y agregó, según www.fiscales.gob.ar: “Se trató de un trabajo de hormiga, donde se visualizaron 10.000 cámaras [sic], lo que permitió individualizar al sospechoso y detenerlo. No quedan dudas de la autoría de Suárez”.
Antes de finalizar, el representante del Ministerio Público recordó que Suárez fue condenado por hechos similares cometidos en la misma zona en la que atacó a Barbieri, algunos de ellos de más de diez años de antigüedad. Marcó que fue condenado por un intento de robo de celular con un cuchillo en 2014 en la zona de avenida Del Libertador y Austria; por un robo simple en la plaza Sicilia en ese mismo año y por el atraco a una peluquería en la calle Gelly al 3400 en 2013.
Por último, se refirió a por qué nunca se encontró el teléfono celular de la víctima. “[Suárez] Sabía que ese celular quemaba”, resaltó el fiscal y consideró que lo descartó de la misma forma en que se deshizo del cuchillo.
Mañana será el turno para que alegue la defensa.