Google está desarrollando una nueva función dentro de su popular aplicación Google Translate que podría cambiar la forma en la que los usuarios aprenden idiomas. Se trata de “Practice” —o “Práctica” en español—, una herramienta enfocada en la enseñanza y el perfeccionamiento de lenguas extranjeras mediante ejercicios interactivos y personalizados.
Aunque la función aún se encuentra en fase beta, varios usuarios han podido acceder a ella de forma anticipada tras habilitarla manualmente en la última versión de la app. Las primeras impresiones indican que el gigante tecnológico busca competir directamente con aplicaciones especializadas como Duolingo, Babbel o Busuu.
La nueva herramienta “Práctica” está integrada directamente en la aplicación oficial de Google Translate para dispositivos móviles. Su objetivo es que los usuarios puedan aprender y mejorar idiomas sin necesidad de descargar aplicaciones adicionales.
Por el momento, los idiomas compatibles en la fase de pruebas incluyen inglés, español, francés y portugués, aunque Google planea ampliar el repertorio en su lanzamiento global.
Al iniciar la función, los usuarios pueden seleccionar su nivel de dominio: básico, intermedio o avanzado. Con base en esta elección, el sistema genera ejercicios prácticos que simulan situaciones reales, como mantener una conversación, pedir comida en un restaurante o dar indicaciones en la calle.
Ejercicios interactivos y seguimiento del progreso
De acuerdo con capturas y descripciones compartidas por quienes han probado la función, “Práctica” no se limita a las tradicionales traducciones de palabras o frases. Los ejercicios se organizan en rondas interactivas que permiten escuchar, repetir, responder y ajustar la dificultad según el avance del usuario.
La herramienta registra los objetivos diarios, el número de palabras aprendidas y el progreso general, incentivando la constancia con actividades diarias. Este enfoque, centrado en la gamificación del aprendizaje, recuerda a la estrategia que convirtió a Duolingo en una de las aplicaciones de idiomas más populares a nivel mundial.
Entre las opciones destacadas se incluye la posibilidad de alternar entre sesiones de escucha o conversación. La primera está orientada a mejorar la comprensión auditiva, mientras que la segunda ayuda a perfeccionar la pronunciación.
En periodo de prueba
En la pantalla de inicio de la función, Google aclara que el acceso a “Práctica” es ilimitado durante un periodo de prueba de acceso anticipado. Esta condición abre la posibilidad de que, en el futuro, el servicio se convierta en una función de pago o pase a formar parte de alguna suscripción premium de la compañía, como ya ocurre con otros productos impulsados por inteligencia artificial, entre ellos algunas funciones avanzadas de Google Gemini.
Google no ha confirmado si mantendrá parte del servicio gratuito ni qué precio podría tener una eventual versión de pago. Sin embargo, el acceso temprano permite a la empresa recopilar datos de uso y comentarios de los usuarios para perfeccionar la experiencia antes de un lanzamiento oficial.
Sin fecha de lanzamiento
Aún no existe una fecha confirmada para la disponibilidad global de esta nueva función, pero el hecho de que ya esté en pruebas activas en ciertos dispositivos sugiere que su llegada oficial podría concretarse en los próximos meses.
De confirmarse, Google Translate dejaría de ser únicamente una herramienta de traducción instantánea para posicionarse como un competidor directo de las principales plataformas de aprendizaje de idiomas.
La apuesta de Google se enmarca en un contexto de creciente interés por integrar funciones educativas en aplicaciones de uso cotidiano. Al añadir un módulo de aprendizaje directamente en Google Translate, la compañía podría aprovechar su enorme base de usuarios —más de mil millones de descargas en Google Play— para ofrecer un nuevo servicio sin depender de la instalación de apps externas.