La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reafirmó este viernes el compromiso de México con el respeto a la soberanía y la autodeterminación de los países, luego de que se informara sobre el despliegue de militares de Estados Unidos en aguas internacionales del Caribe.
Durante su conferencia matutina, conocida como la Mañanera del Pueblo, la mandataria señaló que, de acuerdo con el reporte del secretario de Marina, Almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles, presentado en el Gabinete de Seguridad, actualmente hay diversos buques estadounidenses operando en el sur, entre Panamá y Sudamérica.
Sheinbaum enfatizó que la postura de México es clara y se basa en principios históricos de política exterior: “Nuestra opinión siempre va a ser la autodeterminación de los pueblos, no solo en el caso de México, sino en todos los países de América Latina y el Caribe”, declaró.
La presidenta insistió en que, si bien existe colaboración y coordinación entre naciones, los conflictos deben resolverse por las vías diplomáticas y en instancias internacionales, sin recurrir a actos de injerencia. “Se colabora, se coordina, hay instancias internacionales para resolver conflictos, pero nunca el intervencionismo”, subrayó.
El posicionamiento de Sheinbaum se enmarca en un contexto regional en el que han aumentado las tensiones por la presencia militar en zonas estratégicas, ya que Estados Unidos inició el despliegue de fuerzas aéreas y navales en el mar Caribe meridional con el objetivo de contrarrestar amenazas provenientes de cárteles de la droga de latinoamerica.
México, recordó la mandataria, ha defendido históricamente el principio de no intervención, uno de los pilares de su política exterior desde la Doctrina Estrada de 1930. Este lineamiento establece que el país no se pronuncia sobre la legitimidad de otros gobiernos y evita participar en acciones que vulneren la independencia política de las naciones.
En ese sentido, Sheinbaum hizo un llamado a que se privilegie el diálogo y el respeto mutuo para atender cualquier diferencia o amenaza en la región. “Es fundamental mantener la paz y la cooperación, pero siempre con respeto absoluto a la soberanía de cada país”, concluyó.
El despliegue de tropas estadounidenses en el Caribe, según reportes internacionales, forma parte de operaciones de seguridad marítima y lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, su alcance y objetivos han suscitado inquietudes en gobiernos de América Latina que piden mayor transparencia y consultas diplomáticas previas.