El francés Samuel Umtiti, que fue titular y campeón en la final del Mundial Rusia 2018 y supo compartir plantel con Lionel Messi en Barcelona, atraviesa un presente impensado para un futbolista de su jerarquía. A los 31 años, no tiene sin club, no juega un partido oficial desde enero del año pasado y no es mencionado en rumores sobre un posible regreso a la competencia.
En un contexto en el que los movimientos de mercado copan la agenda del fútbol europeo, y faltando poco más de dos semanas para el cierre del mercado, el caso de Umtiti se vuelve una excepción llamativa. El defensor central se encuentra libre desde el 1 de julio y no registra actividad profesional desde el 21 de enero del 2024, cuando afrontó su último encuentro en Lille por la Copa de Francia. Desde entonces no fue vinculado formalmente con ninguna institución.
Tras su consagración en la selección francesa en 2018, cuando fue titular en seis de los siete partidos en el equipo dirigido por Didier Deschamps e incluso marcó el gol de la victoria en la semifinal frente a Bélgica, hoy su carrera está en declive. Las lesiones fueron el punto de quiebre: desde la final en Moscú sufrió 18 problemas físicos, que lo obligaron a perderse 170 partidos oficiales, según datos recopilados por el portal Transfermarkt.
El defensor francés llegó a Barcelona en 2016 a cambio de 25 millones de euros, procedente del Olympique de Lyon, donde surgió como futbolista. Durante sus primeras dos temporadas mostró un nivel sobresaliente y se ganó un lugar junto a Gerard Piqué. Sin embargo, en los años siguientes su rendimiento se vio desmejorado por problemas físicos recurrentes, especialmente en la rodilla izquierda, que debió operarse, pero a la que nunca recuperó del todo. En 2020 pasó a ser una opción secundaria en la defensa del conjunto español.
En 2022, Barça lo cedió en préstamo a Lecce, de Italia, donde Umtiti se reencontró con la continuidad: protagonizó 25 partidos en la Serie A y se mantuvo sano durante la temporada. Ese breve resurgir lo devolvió a Francia, a donde llegó tras volver y rescindir con Barcelona: Lille lo contrató con la esperanza de que recobrara su nivel. Sin embargo, nuevas molestias marginaron otra vez al defensor, permitiiendo que jugara apenas 13 partidos en dos años. Su contrato terminó a mediados de 2025 y desde entonces Umtiti permanece sin club.
El mercado europeo está abierto hasta el 1 de septiembre, pero los futbolistas en condición de libre pueden ser contratados aun después del cierre. Hasta ahora no ha habido intereses firmes por Umtiti, ni siquiera desde ligas menores. El francés ha dejado de figurar en los planes de los principales equipos del continente.
A pesar de tener edad como para continuar jugando varios años, el defensor nacido en Camerún está fuera del radar. Su caso recuerda lo fugaz que puede ser la cima en el deporte profesional y cómo las lesiones pueden torcer incluso las trayectorias más prometedoras.
En el último año, Umtiti no brindó entrevistas ni comunicados sobre su estado físico ni sus expectativas a futuro. Mientras tanto, su currículum conserva logros importantes: una Copa del Mundo, una liga española y una Copa del Rey, entre otras conquistas.