Increíble la serie argentina de octavos de final de Copa Sudamericana. No alcanzan los dedos de las manos para contar las oportunidades que tuvo Lanús contra Central Córdoba, tanto el jueves de la semana pasada en Santiago del Estero como este jueves en el Sur. Alan Aguerre se hizo invencible ante un club en el que atajó, tanto que sobre la hora debió vencerlo un compañero: Yuri Casermeiro desvió un remate en el camino y el pasaje a cuartos de final se definió en los penales. Luego del 1-0 en el tiempo regular, el anfitrión convirtió todos los remates y venció por 4-2; ahora se verá las caras con Fluminense, de Brasil.
A pedido de Central Cordoba y, lógicamente, del entrenador Omar De Felippe, el primer tiempo fue trabado. Lanús debía imponer su localía para revertir la derrota sufrida en el Madre de Ciudades y avanzar en el torneo. Poseyó la pelota con constancia y lastimó con oportunidades tan serias como esporádicas, pero le costó horrores progresar mediante la circulación y el desequilibrio. Definitivamente, una floja versión en medio de la urgencia.
Con prolijidad, pero sin profundidad. Así manejó Lanús la primera mitad. No supo elaborar, pero tampco el visitante plantó una telaraña irrompible. Las imprecisiones fueron condicionando la confianza del granate como para crecer y buscar con soltura el gol que equlibrara la serie. De hecho, lo que produjo fue forzado.
La primera ocasión en el partido de desquite fue del cuadro santiagueño; un remate débil de Gastón Verón, el autor del gol en la ida. Lanús comenzaron a percutir recién a los 26 minutos, pero exponiendo el estado nada claro de su juego: Eduardo Salvio se encegueció a pocos metros del área y remató como pudo, al punto de casi pifiar un remate que se fue muy desviado a un costado.
La ocasión que sí fue peligrosa, aunque no varió en las maneras, ocurrió dos minutos después: tras un centro de Gonzalo Pérez y disputas aéreas, Alexis Canelo le bajó de cabeza la pelota a Franco Watson y en la puerta del área éste remató con una volea que se fue apenas por encima del arco.
Lanús parecía arrancar, pero apareció un acontecimiento llamativo: un corte de luz que paralizó a todos en la Fortaleza, por la incógnita de no saber cuándo volvería la electricidad. Sin embargo, las luces se encendieron a los pocos segundos, como si alguien hubiera tocado erróneamente un botón que no debía pulsar.
¿EN DÓNDE SE CORTÓ LA LUZ? SÍ, EN LA CANCHA DE LANÚS
Al minuto 30′ del primer tiempo hubo inconvenientes técnicos en la Fortaleza.
CONMEBOL #SudamericanaEnDSPORTS pic.twitter.com/3syg4IDLqU
— DSPORTS (@DSports) August 22, 2025
El que no se encendía colectivamente era el equipo del Sur, aunque tuvo en Watson otra situación de gol muy clara a los 44 minutos: Rodrigo Castillo bajó el balón para el ex futbolista de Instituto y remató de zurda tan cruzado que dejó sin chances a Aguerre, pero José Florentín apareció por detrás y rechazó sobre la línea. ¿Indicios de que el anfitrión terminaba mejor la etapa inicial? No. De hecho, sufrió el final de esa mitad.
El director técnico Mauricio Pellegrino era consciente de la pobreza futbolística, más allá de las oportunidades generadas, y en el descanso decidió meter mano en la alineación. Tras un tiempo lesionado, Marcelino Moreno reemplazó a Canelo, una modificación imaginada a raíz de la consolidación de Castillo como único 9 y jugando con un volante ofensivo por detrás. De hecho, con esa última disposición había empezado a trabarse el encuentro: nadie esperaba el cambio de formación que eligió el DT después de que Lanús ganara en cuatro de las últimas cinco ocasiones.
¡LA SACARON EN LA LÍNEA!
Watson remató dentro del área pero Florentin evitó el gol de Lanús.
CONMEBOL #SudamericanaEnDSPORTS pic.twitter.com/xwRhyiavbZ
— DSPORTS (@DSports) August 22, 2025
El lavado de cara que Lanús necesitaba: la conclusión es que regaló un tiempo. Porque la movilidad comenzó a ser diferente, la llama volvió a encenderse y las chances hasta aumentaron en una ráfaga furiosa de atajadas tremendas de Aguerre y hasta con la mala fortuna incluida. A los 52, el central José Canale se hizo conductor, gambeteó en tres cuartos y sacó un remate raso de derecha que obligó la estirada del arquero.
Tres minutos después, el juego fue de izquierda a derecha hasta Salvio, que desde la puerta del área abrió el pie y su fuerte remate impactó en el travesaño; y dos minutos después, un córner pegó en el pie de Carlos Izquierdoz y eso le bastó para orientar el balón muy esquinado: otra vez apareció el ‘1′ para manotearla cuando parecía ingresar. Ahora sí, Lanús fluía y ya justificaba desde el dominio y las llegadas el merecimiento de igualar la serie (y más).
¡INCREÍBLE ATAJADA DE AGUERRE!
El arquero de Central Córdoba reaccionó de buena manera tras el remate de Izquierdoz.
CONMEBOL #SudamericanaEnDSPORTS pic.twitter.com/Ol4RSkFz6l
— DSPORTS (@DSports) August 22, 2025
Si bien la desesperación le generó algún bache tras esas oportunidades, faltando diez minutos tuvo en Castillo una chance más increíble aún: un cabezazo en el área chica -y en solitario- que encontró bien parado al arquero. Y tres minutos después, otra vez lo hizo volar con otro testazo, pero salió pegado al palo.
Lanús hizo una serie mucho más merecedora de estar en los cuartos de final. Y justamente, cuando parecía que la ilusión se desvanecía, con el tiempo cumplido apareció el desborde del ingresado Armando Méndez y la definición frontal de Dylan Aquino (entró junto al lateral), aunque no convirtió el gol: el que pudo romper a Aguerre en la serie fue Yuri Casermeiro, zaguero del Ferroviario, que interceptó el recorrido, pero su esfuerzo la desvió cuando el arquero parecía controlarla nuevamente, aun tapado. Increíble, pero justo para el local.
¡GOOOOL DE LANÚS!
Sobre el final del partido, Dylan Aquino marco el 1-0 del Granate ante Central Córdoba.
Con este resultado hay penales en la Fortaleza.
CONMEBOL #SudamericanaEnDSPORTS pic.twitter.com/ikfty2awmy
— DSPORTS (@DSports) August 22, 2025
La definición pareció ser la fiel justicia. Central Córdoba siguió sin ayudar a su héroe y éste quedó sin poderes. Verón se resbaló en el primer tiro y la tiró afuera, y en el siguiente Braian Cufré pateó liviano a su izquierda y fue detenido por Losada. Incluso, Jonathan Galván también se resbaló y convirtió, pero se aplicó la nueva regla: el VAR advirtió que pateó con los dos pies y debió patearlo de nuevo, convirtiendo mejor afirmado.
Un Lanús implacable en los remates consiguió el boleto con Moreno cerrando la tanda. Los santiagueños querían una nueva hazaña en el estadio Maracaná, pero será el Granate el que se cruce en cuartos ante Fluminense.