Tuvo mucha popularidad con las películas Exterminator 3 y Exterminator 4, y el exitoso programa de Tefe, Brigada cola. Entonces era un incipiente adolescente que no supo manejar la fama y tuvo problemas de adiciones que lo alejaron del medio. Hoy, Javier B elgeri está en proceso de recuperación, vive con una familia amiga que lo contiene y quiere volver a actuar. LA NACION habló con el actor, quien contó que el 13 de septiembre se estrena el corto Nico, como su personaje en Brigada cola, una ficción que se mezcla con la realidad porque “imagina cómo fue la vida de Nico después del programa y tiene muchos puntos en común con la mía”, aclara Belgeri. Se refirió también a sus días oscuros y a cómo logró salir adelante. Y dice que está preparando Exterminator 5.
–¿Volves al medio después de muchos años, ¿cómo se dio?
–Estamos volviendo con un proyecto muy importante porque apuntamos a filmar Exterminator 5, 32 años después. Ya hicimos un cortometraje con Nancy Anka y Carlos Pedevilla, y es como un hijo de las cuatro películas. Vamos a ver si este hijo empieza a caminar solo y si le gusta a la gente. Lo estrenamos el 13 de septiembre en el bodegón California dreaming, de San Justo, y Sebastián Gutiérrez es el guionista. Este trabajo muestra a un Nico ya apartado de la brigada, que entró en la delincuencia, las drogas y el alcohol. Porque al haberse ido de las fuerzas, quedó a la intemperie. Nico está solo. Ese día también se va a proyectar Exterminator 3.
–La ficción se mezcla con la realidad porque eso te pasó a vos, ¿por qué decidiste contarlo de esta manera?
–Porque me parece que es más fácil. Y va de la mano. Me animé a contarlo hace un tiempo en el programa Seres libres, de Gastón Pauls. Tuve un pasado bastante complicado a raíz de algunos excesos, algunas adicciones que ahora están controladas. Estoy en otra etapa, con ganas de volver, de seguir adelante. Lo que cuenta el corto es muy veraz. Y si se da, en Exterminator 5 se va a mostrar lo que realmente sufrió Nico: problemas con el alcohol, la droga, delincuencia. Un Nico que no sabe para dónde ir y encuentra a su amigo Carlos, que lo orienta. También está Nancy Anka con un lindo personaje porque es la hija del Albino, uno de los personajes macabros de la saga. Ella sigue con esa banda porque quiere vengar la muerte de su padre, y se acerca a Nico, que está intentando recuperarse. Lo que quiero mostrar es que se puede.
–Porque vos pudiste…
–Sí. Se puede salir adelante después de un pasado malo. Hay que hacer mucho hincapié en el tema de la droga hoy en día, porque hay mucha gente que está sufriendo. Hay paco, crack, cocaína, marihuana, fentanilo que está matando a muchísima gente. Es realmente terrible. Y de esta manera pongo mi granito de arena. Quiero que los chicos tomen conciencia y sepan que no está bueno drogarse y pasar por lo que yo pasé. La idea es llegar a los adolescentes a través de la película. Creo que es hora de que empecemos a usar el cine, la televisión y la radio para dar mensajes verdaderos.
–Contaste alguna vez que empezaste a tomar alcohol siendo muy chiquito todavía.
–Siendo muy chico, sí. A los 13 años empecé a tomar alcohol. Estaba en un momento de mucha fama y fue difícil manejarla. No estaba rodeado de buena gente tampoco. Se te empiezan a pegar los amigos del campeón y uno se va mareando. Por suerte mis padres me pudieron frenar a tiempo. Pero después esa lucha siguió. Ahora puedo decir que esa etapa está casi vencida. Necesitaba que alguien me dé la oportunidad de contar estas cosas hermosas y locas que tengo en mi cabeza, hacer todo esto que mamé de chico, volver a un estudio de grabación.
–¿Cómo fueron estos años oscuros?
–Estuve perdido mucho tiempo. Estuve en el Borda, tuve problemas de salud mental también. Pero pude salir. Porque si uno tiene ganas, se sale. Yo me caí muchas veces y me levanté. Eso también está bueno contarlo porque parece que es fácil y no lo es. He pasado tremendas cosas: dormí en la calle, viví en estaciones de trenes, en umbrales de casas. Viví de prestado. Todo fue a raíz de malas decisiones. Al ser tan chico no estaba preparado para el éxito. Me mareé y tropecé.
-¿Y hoy cómo es tu vida?
– La verdad que hoy tengo una vida buena. Tengo cuatro hijos maravillosos: Agustín de 26 años, Lucía de 23, Belén de 22 y Brisa de 10. A la que más veo es a María Belén Belgeri, quizá porque tenemos más cosas en común: hace Tik Tok y uno de ellos tuvo muchísimas reproducciones, grabó videos con La banda de Lechuga. Si hacemos Exterminator 5 seguramente va a tener un personaje. Está todo planificado.
-¿Estás trabajando?
-Trabajo de lo que sea. Fui vendedor, trabajé en un negocio, en camiones, acompañando al conductor. Con un amigo salimos a cortar el pasto, a ganarnos la vida. Fui albañil. No se me caen los anillos.
–¿Y dónde vivís?
–Estuve en un centro de salud mental. Las cosas son difíciles a veces y uno está a los tumbos. Pero ya pasó. Ahora estoy viviendo en una casa de familia, con mi amigo Ezequiel y su mamá que es una señora maravillosa, y me están ayudando un montón. Hoy estoy contenido, con tratamiento médico, psiquiátrico y psicológico, en el Hospital Carrillo de Los Polvorines y con la gente del proyecto Casa Pueblo. También tengo ayuda de mi mamá y de mis amigos Ezequiel, Sebastián y Carlos. Estoy con mucha fuerza y me hace bien tener objetivos.
–Empezaste a trabajar de muy chico, ¿cómo fue?
–Lo primero que hice fue con Flavia Palmiero en La ola está de fiesta, a los 11 años. Hicimos televisión, teatro y giras. Y mientras estaba grabando con Flavia me llamaron para filmar Exterminator 3 y luego la 4. Después hice Brigada cola durante tres años; teatro, televisión y giras en todo el país. Y además grabé dos discos como cantante con Los Nicos. No tuvieron mucha repercusión, pero sirvieron para trabajar y defenderme un poco en ese momento.
–¿Qué recuerdos tenés de esos momentos de tanta popularidad?
–Tengo muy lindos recuerdos. El más lindo es el contacto con el público, en el teatro; que la gente te salude, te pida un autógrafo, te tire buena onda. La televisión también tiene su magia y llega a más personas. Tengo recuerdos maravillosos de trabajar con Flavia. Los ensayos, irnos de gira por todo el país, grabar con Guillermo Francella. Uno de mis anhelos más grandes es volver a trabajar con él. Estaría buenísimo que se sume a Exterminator 5 porque todo lo que él hace prospera. Lo conocí en Exterminator 3, y seguimos trabajando en la 4 y después en el programa. Fueron muchos años de compartir y la verdad que nuestra relación era fenomenal. Un tipazo. Trabajar con él es una alegría tremenda. Emilio Disi también era muy buena persona y un genio total; era muy gracioso. Lo mismo que Fernando Lupiz.
-¿Crees que no te hubieras alejado del medio si no hubiese sido por las adicciones?
-Quemé muchas etapas de joven. Me parece que en algún momento me había cansado un poco. Quería disfrutar la vida. Pero hoy puedo decir que no me hubiese alejado nunca.