Durante el primer año de la administración de Claudia Sheinbaum, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reportó la recuperación de más de 2,000 bienes culturales pertenecientes al patrimonio de México.
Esta cifra se suma a los 14,048 bienes culturales repatriados durante el sexenio federal del expresidente Andrés Manuel López Obrador, de los cuales 13,428 eran objetos arqueológicos y 620 de carácter histórico, así lo detalló José Luis Perea González, secretario técnico del INAH.
El antropólogo afirmó que estos resultados evidencian tanto el compromiso del Estado mexicano con la defensa de su patrimonio como la magnitud de la problemática, resaltando la necesidad de consolidar políticas permanentes y sostenidas para la protección de los bienes culturales.
En el marco de la 36 Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH), expertos en derecho, arqueología, conservación del patrimonio, diplomacia cultural y museología analizaron los retos y avances en la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales.
Carlos Tejada, oficial nacional de Cultura de la Unesco, advirtió que este delito, identificado como la tercera fuente de financiamiento del crimen organizado a nivel global, representa no solo la pérdida material de piezas insustituibles, sino también la ruptura de los vínculos entre los objetos y sus comunidades de origen.
Tejada destacó la reactivación, en 2022 y a solicitud de México, de la Conferencia Mundial sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible (Mondiacult), la cual incluyó en su declaración la lucha contra el tráfico ilícito como parte del ejercicio de los derechos culturales y se alineó con los fundamentos de la Convención de la Unesco de 1970.
El evento contó también con la participación de Alejandra Barajas Moreno, directora general de Diplomacia Cultural de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quien explicó que México opera una red de más de 160 representantes en el exterior con capacitación para atender decomisos, monitorear anuncios de ventas en casas de subastas y gestionar entregas voluntarias de bienes por instituciones o particulares.
Barajas Moreno subrayó que los avances logrados, especialmente desde el lanzamiento de la campaña “Mi patrimonio no se vende”, han sido destacados porque han propiciado el diálogo y la colaboración en torno a esta problemática.
Por su parte, Alejandro Bautista Valdespino, subdirector de Registro Público de Monumentos Arqueológicos Muebles, indicó que desde la década de 1930, el INAH ha registrado más de 2 millones 200 mil bienes arqueológicos, labor a la que se suman los dictámenes que peritos arqueólogos emiten sobre casos turnados por la consultoría jurídica de la SRE, con el fin de determinar la autenticidad de piezas decomisadas, ofertadas en venta o entregadas voluntariamente.