Un Staffordshire bull terrier azul demostró un sorprendente instinto durante un incendio residencial en Aurora, Illinois, colaborando activamente en su propio rescate. El episodio, captado por la cámara corporal de un agente policial “muestra a la policía entrando en una casa llena de humo para salvar a la mascota de la familia, con el perro guiando al agente hasta su correa antes de ser sacado por la puerta”. Así lo describe el video difundido por ABC News en TikTok.
Al originarse el incendio, la vivienda quedó pronto envuelta en humo, lo que alertó a los servicios de emergencia. El perro se encontraba solo y, cuando un agente logró acceder al interior, lo llamó diciendo: “Oye amigo, ven aquí”. Lejos de acudir de inmediato, el animal se internó aún más en la casa y, según se observa en la grabación, no era señal de miedo, sino de intención: condujo al agente hasta el lugar donde estaba colgada su correa, ubicada en un gancho cerca de la puerta trasera. Al percatarse de las señales del animal, el policía pudo colocar la correa en su collar y finalmente ambos salieron juntos del lugar, mientras el agente tosía por el humo.
La secuencia no tardó en provocar reacciones y comentarios en redes sociales. “¡No iba a romper las leyes de la correa delante de un agente!” escribió, de modo jocoso, un usuario.
Los Staffordshire bull terrier, como son descritos en la protectora de animales PDSA, son “perros vivaces y enérgicos” que “aman la compañía y los mimos de su dueño (una vez que se han cansado)”. La organización agrega: “Les encanta estar en el centro de todo lo que sucede en el hogar. Los Staffies son perros robustos y sólidos con una energía aparentemente inagotable, lo que los convierte en la mascota perfecta para hogares activos. Les va mejor cuando hay alguien en casa todo el tiempo para hacerles compañía; de lo contrario, ¡puede que tus muebles paguen el precio!”
Otro perro salvador
Este no ha sido el único caso reciente de un perro ‘heroico’ en un incendio. En julio, en Francia, Fievel, el perro de una familia, detectó antes que nadie que algo anómalo sucedía: sus ladridos alertaron a sus dueños tras oír los gritos de ayuda provenientes de la casa de unos vecinos, que estaba en llamas. Estas señales permitieron que la familia —una pareja francesa con cuatro hijos, uno de ellos un bebé de seis días—, pudiera ser rescatada en Bailleul, una localidad situada al norte del país. El incendio, que a punto estuvo de terminar en tragedia, tuvo un desenlace favorable gracias a la intervención decisiva del animal.
“Jamás podré agradecer lo suficiente a nuestros vecinos, nuestros salvadores, por su acto heroico. Ellos no quieren que lo digamos así, pero para nosotros lo son”, comentó uno de los miembros de la familia afectada. A pesar de haberlo perdido todo, lo más importante se salvó: la vida. “Pensé que íbamos a morir, que no íbamos a lograrlo, que nos iban a alcanzar las llamas”.