El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, abrió su discurso en la Asamblea General con un mensaje crudo: “en la guerra con Rusia no será el derecho internacional el que marque la diferencia, sino las armas”. Admitió que resulta “enfermo, pero real” que un país que busque la paz deba trabajar en fortalecer su poder militar, porque “no la cooperación ni la ley, sino las armas deciden quién sobrevive”. Con evidente frustración hacia el sistema de Naciones Unidas y en particular al Consejo de Seguridad, donde Rusia tiene poder de veto, Zelensky subrayó que el derecho internacional “no funciona plenamente, a menos que se tengan amigos poderosos dispuestos a defenderlo”.
El líder ucraniano dedicó un pasaje central a la evolución de la tecnología bélica, en particular los drones: “Las armas evolucionan más rápido que nuestra capacidad para defendernos. Detener un dron es más difícil que detener un cuchillo o una bomba”. Recordó que hasta hace poco solo los más poderosos podían usarlos, pero hoy “cualquiera, con un simple dron capaz de volar miles de kilómetros, representa una amenaza”. Se refirió al caso de los drones detectados la semana pasada en Polonia. Para Zelensky, ese escenario confirma que la seguridad global ya no puede sostenerse solo en declaraciones: “¿Qué puede esperar realmente alguien que vive una guerra de la ONU o del sistema internacional, salvo declaraciones y más declaraciones?”, preguntó, en alusión también a los conflictos en Gaza y Siria.
Su discurso empezó con una defensa de la ONU. “Creer en las Naciones Unidas es creer con firmeza en la universalidad de los principios y valores recogidos en su Carta y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos; es eludir la tentación de modularlos con particularismos, con relativismos, con excepciones. Porque la dignidad del ser humano no es negociable. Creer en las Naciones Unidas es, también, creer en un mundo basado en normas. Las normas generan conductas a las que se ciñe la enorme mayoría de los actores internacionales”, dijo.
Después dedicó un tiempo al conflicto bélico en Gaza. Dijo al resto de los representantes internacionales: “No podemos guardar silencio, ni mirar hacia otro lado, ante la devastación, los bombardeos, incluso de hospitales, escuelas o lugares de refugio; ante tantas muertes entre la población civil… o ante la hambruna y el desplazamiento forzoso de cientos de miles de personas…, ¿con qué destino? Son actos aberrantes que están en las antípodas de todo lo que este foro representa. Repugnan a la conciencia humana y avergüenzan al conjunto de la comunidad internacional. La comunidad internacional debe asumir su responsabilidad para hacer realidad cuanto antes una solución viable que contemple la existencia de los dos Estados”, añadió.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, respondió con dureza a Donald Trump después de que el presidente estadounidense lo calificara de “terrible” en un discurso ante la ONU y afirmara que la capital británica estaba siendo llevada hacia la “sharía”. Khan acusó a Trump de ser “racista, sexista, misógino e islamófobo”, declaraciones que encendieron la polémica en Gran Bretaña.
Las palabras de Trump generaron malestar entre dirigentes laboristas. El ministro de Salud, Wes Streeting, defendió a Khan como un líder que “defiende la diversidad de orígenes y opiniones”, mientras que Pat McFadden, secretario de Trabajo y Pensiones y estrecho aliado de Keir Starmer, evitó pronunciarse directamente sobre los dichos de Trump, aunque destacó a Londres como una ciudad global.
‘I look at London, where you have a terrible mayor. It’s so changed, now they want to go to Sharia Law…’
US President Donald Trump calls out Sadiq Khan during his address to the UN General Assembly. pic.twitter.com/PsuXjbl29O
— GB News (@GBNEWS) September 23, 2025
Dirigentes de 118 países celebran este miércoles una cumbre en Nueva York en la que defenderán la lucha contra el cambio climático. No estará Estados Unidos, cuyo presidente Donald Trump aseguró en la víspera que esta causa es una “estafa”.
El primer ministro chino, Li Qiang, abrirá en la sede de Naciones Unidas en Nueva York este encuentro, en el que más de un centenar de países dibujarán sus planes para combatir el calentamiento global. El dirigente chino, cuyo país emite el 30% de los gases de efecto invernadero del planeta, anunciará previsiblemente un objetivo histórico: reducir las emisiones de aquí a 2035. Hasta la fecha, China no se ha comprometido nunca a recortar sus emisiones de dióxido de carbono, uno de los principales gases causantes del efecto invernadero.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, afirmó el martes que si Donald Trump realmente aspira a ganar el Premio Nobel de la Paz, debe lograr detener la guerra en Gaza. En declaraciones a la cadena francesa BFM TV desde Nueva York, Macron sostuvo que solo el mandatario estadounidense tiene la capacidad de presionar a Israel para poner fin al conflicto.
“Hay una persona que puede hacer algo al respecto, y es el presidente de Estados Unidos”, señaló. Y añadió: “La razón por la que él puede hacer más que nosotros es que Francia no suministra las armas ni los materiales que hacen posible la guerra en Gaza. Estados Unidos de América sí lo hace”.
Emmanuel Macron à Donald Trump: “Le prix Nobel de la paix n’est possible que si vous arrêtez ce conflit” à Gaza pic.twitter.com/QpVXsw36zY
— BFMTV (@BFMTV) September 23, 2025
Tras endurecer su discurso contra Moscú en su encuentro bilateral con Volodimir Zelensky —al instar a los países de la OTAN a derribar los aviones rusos que violen su espacio aéreo—, Donald Trump dejó planteado un nuevo escenario de tensión con el Kremlin. En ese contexto, todas las miradas estarán hoy puestas en el discurso del presidente ucraniano en la Asamblea General, donde se espera que busque capitalizar el respaldo de Washington para reforzar la presión internacional contra Rusia. La jornada también tendrá a Javier Milei como protagonista, con su segunda intervención consecutiva en el foro global.