En el marco de la 37ª Convención Minera Perúmin, realizada en Arequipa, el Ministerio de Educación otorgó un reconocimiento especial al maestro y escritor Everardo Zapata, autor del célebre libro Coquito. La distinción fue recibida con emoción por el educador, quien a sus 99 años continúa siendo un referente en la formación de varias generaciones de peruanos.
El homenaje se llevó a cabo en presencia del ministro de Educación, Morgan Quero, quien destacó la vigencia del método de enseñanza de la lectura creado por Zapata hace siete décadas. La ceremonia coincidió con la celebración de los 70 años de publicación de Coquito, obra que ha marcado la infancia de millones de escolares.
70 años de Coquito
Durante la ceremonia, la hija del escritor, Ruth Zapata, destacó la importancia del reconocimiento en un año especial para su padre. “Son los 70 años del libro Coquito y los 99 años de mi padre, rumbo a sus cien. Es un tiempo muy especial porque Coquito está metido en el ADN de los peruanos”, declaró a Canal N.
El texto, publicado por primera vez en 1955, ha sido utilizado por generaciones de estudiantes y sigue vigente en la actualidad. Según destacó Ruth, “ya son adultos mayores de más de setenta años que aprendieron a leer con Coquito, y al mismo tiempo, niños de cuatro, cinco o seis años siguen usándolo”.
Un legado que trasciende fronteras
Al tomar la palabra, Everardo Zapata expresó su gratitud por el homenaje y resaltó la dimensión alcanzada por su método. “Son 70 años que está vigente Coquito. Generalmente, los libros de texto solo duran 10 años, el que más 15, y solo los religiosos pasaban de 50. Pero Coquito sobrepasó a todos porque es un libro hecho con amor”, señaló en entrevista con Canal N.
El maestro subrayó que su objetivo siempre fue enseñar de manera sencilla y con cercanía al estudiante. Gracias a ello, el método ha sido adoptado no solo en el Perú, sino también en más de diez países de habla hispana, consolidando su impacto en la educación básica a nivel regional.
“Se enseña con amor”
En su mensaje a los maestros y jóvenes, Zapata insistió en que el aprendizaje debe basarse en la empatía y la paciencia. “Ya no hay la letra con sangre, no. Hay que enseñarles a los niños con amor. Primero los maestros deben tener paciencia, amor y cariño. Todos aprenden a leer, todos”, afirmó el amauta para el citado medio.
Con la condecoración en Perúmin, Everardo Zapata no solo fue homenajeado por su trayectoria, sino también reafirmado como uno de los símbolos vivos de la educación en el Perú. Su legado, encarnado en el libro Coquito, continúa formando a nuevas generaciones y consolidándose como parte de la identidad cultural del país.
“Estoy muy feliz por el reconocimiento de mi patria, en sus instituciones”, concluyó el maestro de 99 años, quien se prepara para celebrar su centenario en 2026 con la satisfacción de haber dejado una huella imborrable en la educación peruana.