El estado de Nueva York vive otoños frescos y cambiantes, donde los paisajes se tiñen de tonos rojizos, anaranjados y dorados. Esta estación marca una transición progresiva hacia el invierno, con temperaturas que descienden de manera constante, lluvias moderadas y, en algunos casos, las primeras nevadas de la temporada.
¿Cómo son los otoños en Nueva York?
El otoño en la ciudad de Nueva York se caracteriza por un cambio notorio en las temperaturas diarias. Durante septiembre, las máximas suelen rondar los 80°F (27°C), pero hacia finales de noviembre se ubican cerca de los 50°F (10°C), según datos de Weather Spark sobre el promedio de la última década.
Las mínimas también descienden, al pasar de 67°F (19°C) al inicio de la temporada a 38°F (3°C) en noviembre. Este enfriamiento progresivo rara vez desciende por debajo de 28°F (−2°C), aunque en los días más fríos puede acercarse a ese límite.
- En Albany, la capital estatal, el escenario es aún más fresco: las temperaturas diurnas bajan de 78°F (26°C) a 43°F (6°C), con noches que pueden registrar valores como 18°F (−8°C) a medida que se aproxima el invierno.
- En la ciudad de Nueva York, las temperaturas máximas diarias se ubican en torno a los 50°F (10°C), rara vez bajan de 38°F (3°C) o superan los 87°F (31°C).
Además del frío creciente, el otoño lleva cambios en la duración del día. En la ciudad de Nueva York, el 1° de septiembre amanece a las 6.23 hs y el sol se oculta a las 19.27 hs. Para el 30 de noviembre, el amanecer ocurre a las 7.26 hs y el atardecer sucede a las 16.29 hs, lo que significa casi cuatro horas menos de luz solar.
Qué se espera para este otoño en Nueva York
Según el Old Farmer’s Almanac, este otoño de 2025 en el noreste de Estados Unidos será más frío y seco de lo habitual. En octubre habrá 46°F (8°C) en promedio, es decir, 3°F por debajo de lo normal. Las precipitaciones también se reducirán, con una media de 2,5 pulgadas (63 mm) en octubre, con más lluvias en el norte del estado y condiciones menos húmedas hacia el sur.
Estos patrones afectarán tanto a Albany como a la ciudad de Nueva York. Mientras en la capital estatal el descenso de la temperatura intensificará los colores otoñales en parques y reservas como Thacher State Park, en la ciudad costera los vientos fríos y la menor humedad ofrecerán días frescos, pero menos lluviosos. En ambos casos, la temporada mostrará un predominio de chubascos aislados y un ambiente más fresco que el usual para esta época del año.
Temperatura promedio para el otoño en Nueva York
Las medias estacionales reflejan el contraste entre las dos principales ciudades del estado. En la ciudad de Nueva York, los valores máximos durante el otoño varían entre 50°F (10°C) y 80°F (27°C), mientras que las mínimas oscilan de 67°F (19°C) a 38°F (3°C).
En cambio, Albany presenta un rango más frío: máximas de 78°F (26°C) a 43°F (6°C) y mínimas que pueden bajar hasta 29°F (−2°C) en promedio hacia noviembre.
Este contraste se debe en gran parte a la ubicación geográfica. La ciudad de Nueva York, influenciada por el océano Atlántico, mantiene un clima algo más templado en comparación con el interior del estado. Albany, con un perfil continental, refleja mejor los fríos otoñales y anticipa el invierno con noches más heladas.
Cuándo termina el otoño en EE.UU.
El otoño astronómico en Estados Unidos finaliza con el solsticio de invierno. En 2025, este fenómeno tendrá lugar el 21 de diciembre, cuando el hemisferio norte reciba la menor cantidad de luz solar del año. A partir de ese momento comenzará oficialmente el invierno, aunque en ciudades como Albany las condiciones invernales suelen adelantarse varias semanas con las primeras nevadas de noviembre.
En la ciudad de Nueva York, el cambio de estación se percibe más tarde, ya que la influencia costera retrasa la llegada del frío extremo. Sin embargo, hacia fines de noviembre, los neoyorquinos ya viven días cortos, cielos más grises y temperaturas que anuncian la inminencia de la nueva estación.
El promedio de lluvias y nevadas en Nueva York
En cuanto a las precipitaciones, la ciudad de Nueva York mantiene un patrón relativamente constante durante el otoño, con un 25% de probabilidad diaria de registrar al menos 0,04 pulgadas (1 mm) de lluvia. La acumulación promedio mensual varía entre 3,4 y 3,6 pulgadas (86 mm y 91 mm), cifras que rara vez superan las seis pulgadas (152 mm).
En Albany, la situación es diferente: allí la temporada comienza con un promedio de 3,3 pulgadas (84 mm) de lluvia en septiembre, pero disminuye progresivamente hasta alcanzar 2,6 pulgadas (66 mm) en noviembre.
El inicio del otoño en ambas ciudades está marcado por la lluvia, mientras que las nevadas suelen aparecer hacia el final de la estación.
- En Nueva York, la primera nevada promedio se registra en noviembre, aunque la acumulación rara vez supera 1,3 pulgadas (33 mm) en ese mes.
- En Albany, la transición es más abrupta: hacia finales de noviembre ya es común que se acumulen alrededor de cinco pulgadas (127 mm) de nieve en un período de 31 días, lo que marca el inicio de una temporada blanca que se intensificará en los meses siguientes.
¿Cómo es el resto del año en el estado?
El clima de Nueva York es diverso y cambia drásticamente entre regiones. En general, el estado presenta un patrón continental húmedo, con veranos cálidos y húmedos, inviernos fríos y nevados, y primaveras variables con frecuentes lluvias.
- Durante el verano, Albany suele registrar máximas que rondan los 83°F (28°C), mientras que la ciudad de Nueva York llega a valores más tropicales, con picos de 86°F a 90°F (30°C a 32°C) y noches cálidas que rara vez bajan de los 68 °F (20 °C).
- En invierno, la capital estatal experimenta temperaturas gélidas que pueden descender hasta los 17°F (−8°C) en promedio, con abundantes nevadas que superan las 60 pulgadas anuales. La ciudad de Nueva York, más moderada por la influencia del mar, promedia entre 37°F (3°C) y 42°F (6°C) en enero y febrero, con nevadas totales que varían entre 10 y 25 pulgadas.
El estado también recibe la influencia de fenómenos meteorológicos extremos. Las tormentas invernales y el llamado “efecto lago” generan nevadas intensas en el oeste y centro, mientras que los huracanes o ciclones tropicales pueden impactar de manera ocasional durante el verano y el otoño, en promedio cada 15 años.