Los ministerios de Exteriores de Qatar y Egipto –países mediadores en el conflicto de Gaza– han celebrado la respuesta del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) al plan propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el que la milicia ha afirmado estar dispuesta a liberar a todos los rehenes israelíes.
El Cairo ha indicado que esta declaración demuestra el «compromiso» de Hamás por «salvar la vida del pueblo palestino» y su «deseo» de «poner fin a un período oscuro en la historia de la región».
«También (la declaración de Hamás) reconoce la necesidad de poner fin a esta guerra, lo que allanará el camino para la realización de las aspiraciones del pueblo palestino de un Estado», ha aseverado el Ministerio de Exteriores egipcio en un comunicado.
Por su parte, Doha ha acogido «con satisfacción» las palabras de la milicia islamista y ha mostrado su apoyo al presidente Trump en su intención de alcanzar un alto al fuego en la Franja de Gaza que facilite la liberación «segura y rápida» de los rehenes y acabe con el «derramamiento de sangre de los palestinos».
Ambos países han confirmado su disposición para actuar como mediadores con el objetivo de que las conversaciones para alcanzar el alto al fuego continúen, en coordinación con Estados Unidos.
«Esto allanará el camino para una nueva etapa hacia la paz, comenzando con negociaciones sobre los detalles y mecanismos necesarios para implementar la visión del presidente Trump sobre el terreno en el marco de un horizonte político que conduzca a la solución de dos Estados, cuyos términos de referencia ha acordado la comunidad internacional, logrando así la paz y la prosperidad en la región», reza la nota emitida por el Ministerio egipcio.
Hamás ha confirmado este viernes estar de acuerdo con «la liberación de todos los prisioneros israelíes, tanto vivos como muertos, según la fórmula de intercambio contenida en la propuesta (de Trump)», sin embargo, ha asegurado que debe participar «responsablemente» en el futuro de la Franja.
Por su parte, Donald Trump declarado que Hamás está «listo» para la paz y ha pedido a Israel que «pare inmediatamente los bombardeos» en el enclave palestino, donde han muerto alrededor de 66.300 personas desde el 7 de octubre de 2023.