Doce años después de la dramática muerte del marido de Raquel Sánchez Silva, Mario Biondo, y tras una incansable lucha de su familia para demostrar que no fue un suicidio sino un homicidio, el caso está de nuevo de plena actualidad después de que la Audiencia de Madrid haya emitido un auto apuntando que el fallecimiento del cámara italiano podría no haber sido de naturaleza suicida, reforzando así la teoría de Pipo y Santina Biondo de que su hijo fue asesinado y alguien colocó el cadáver en la casa que compartía con la presentadora para simular que se había quitado la vida.
Sin embargo, la Justicia madrileña desestima el recurso de apelación de la familia Biondo y rechaza reabrir el caso por tratarse de «cosa juzgada», por lo que desde Vosseler Abogados (representantes legales de los italianos) han confirmado que recurrirán el caso al Tribunal Constitucional.
Feliz por este auto de la Audiencia de Madrid, Santina ha atendido a diferentes medios de comunicación para poner el foco sobre Raquel Sánchez Silva: «Su comportamiento con nuestra familia es muy sospechoso. La familia de su marido lucha por saber la verdad, y ella debería estar de nuestro lado… Nunca ha llamado al móvil para decir una palabra. Nunca. Solo en el funeral, y después desapareció. Solo tengo un correo en el que me dijo que Mario había destrozado su imagen con lo que había hecho. Muy mala, muy mala» ha sentenciado en declaraciones a ‘El programa de Ana Rosa’.
Mientras la presentadora extremeña guarda silencio, su íntimo amigo Boris Izaguirre -con el que estuvo hace apenas una semana, en la celebración del 60 cumpleaños del venezolano- no ha dudado en salir en su defensa. «Ninguno de los dos nos podíamos imaginar que se iba a precipitar de nuevo otra vez la investigación. Y digo lo que siempre digo, yo creo que todos podemos pensar lo que quieran o no hacer los familiares de Mario, pero quizás algunos de ellos podrían empezar a pensar en que Mario merece descansar en paz» ha expresado rotundo.
«No es justo, porque ya han pasado 12 años. Fue terrible cuando sucedió, pero Raquel ha rehecho su vida, tiene dos hijos maravillosos, su marido Matías es un hombre extraordinario y yo creo que como familia no se merece sufrir todo este tipo de tratamiento» se ha lamentado, revelando que Raquel «está feliz. Es una persona, una superviviente extraordinaria y a todos nos ha demostrado que uno puede caer y levantarse».
Cambiando de tema, Boris ha reconocido que está deseando leer las memorias de Isabel Preysler, que se publicarán el próximo 22 de diciembre y en las que, como apuesta, sí hablará de Mario Vargas Llosa: «Yo creo que sí, pero claro, me pones en un aprieto porque tampoco yo tampoco tengo información privilegiada, Isabel ha sido muy discreta, Isabel es muy profesional todo el mundo lo sabe y ella pues ha estado muy a lo que sus editores le han dicho».