El Ejecutivo regional que preside Isabel Díaz Ayuso reconoce en un informe interno que la situación del parque de vehículos de su cuerpo de bomberos es “críticamente deficitaria”. Así la califica Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, en un documento que envió en julio al Consejo de Gobierno para que aprobase un procedimiento de emergencia para reparar una Bomba Rural Pesada (BRP), un vehículo clave para el trabajo de los bomberos. El Cuerpo solo tiene 49 de estos vehículos, la mitad de más de diez años de antigüedad. Las recientes averías han motivado que la disponibilidad de esta flota “se haya reducido a niveles inadmisibles” y hay riesgo de que algunos parques no dispongan de estas unidades, “una posibilidad sin precedentes”.
Con más de 1.600 efectivos, la Consejería reconoce que el Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid es “uno de los Cuerpos de más envergadura en España y en Europa, dando servicio a más tres millones de habitantes en la región”. De hecho, las estadísticas revelan que cada año tienen más trabajo. En 2019, por ejemplo, año en el que Ayuso llegó a la Presidencia, realizaron 31.000 intervenciones de emergencia. 2024 cerró con más de 37.000.
El informe detalla “la fundamental importancia de los vehículos BRP” en la atención de emergencia, por eso la premura a la hora de contratar la reparación de uno de estos camiones pesados. Y es que al parecer un solo vehículo puede marcar la diferencia. La Consejería revela “la insuficiencia de medios y su grave afección a la ciudadanía del territorio atendido”, lo que determina la necesidad de tramitar el servicio de reparación de esa unidad BRP, que se accidentó en diciembre de 2024.
Los vehículos tipología ‘Bomba Rural Pesada’ (BRP) son la columna vertebral del cuerpo. Son movilizados a todas las emergencias porque “disponen de equipos suficientes para poder dar una primera respuesta a cualquier clase de incidencia”. En consecuencia, señalan en la Consejería, “la respuesta a emergencias se sustenta en estos recursos BRP”. Actualmente, la flota de BRP es de 49 vehículos. Para que esa respuesta sea adecuada, “resulta fundamental disponer de un mínimo de dos BRP por parque, capaces de atender al menos dos avisos simultáneos o asegurar la atención a una emergencia siempre desde el parque más próximo en caso de avería de uno de los dos vehículos”. El 55% de la flota (27 vehículos) tiene más de diez años. Y de estos, 12 superan los 20 años de antigüedad.
44 nuevos vehículos
La Consejería es consciente de que debe renovar esta flota. En 2023, por ejemplo, “la baja simultánea e inesperada de cinco vehículos generó una grave escasez de recursos disponibles en la flota BRP para atender las emergencias, dando lugar a una media de cuatro parques sin este recurso. Ante esta situación, “y el consiguiente grave peligro asociado”, a finales de 2023 se tramitó un procedimiento de emergencias para comprar cuatro BRP, unidades que fueron entregadas en noviembre de 2024. La Dirección General de Emergencias ha establecido un plan de compras para sustituir a los vehículos más viejos. El objetivo es adquirir 44 BRP entre 2025 y 2029.
Pero ha habido problemas. En 2024 se tramitó el primer contrato público para adquirir 13 nuevas BRP, que no ha podido culminarse. La Administración tuvo que declarar desierta la licitación por “conductas colusorias” entre dos de las empresas que se presentaban, que se pusieron de acuerdo en algunas fases del procedimiento. Una tercera empresa reveló su oferta en un momento procedimental incorrecto y vulneró la “regla del secreto de las proposiciones”. Así que la Comunidad de Madrid ha tenido que revisar la planificación para comprar los 44 nuevos BRP.
No solo por los errores en esta primera licitación, “sino por acontecimientos de imposible previsión y que han condicionado negativamente la disponibilidad” de estos vehículos. Por ejemplo, “la inesperada recurrencia de averías en la flota, que han motivado que esta se haya visto reducida hasta niveles inadmisibles y sea necesario actuar con premura para corregir esta situación y restablecer la normalidad”. Hay un contrato de mantenimiento de estos vehículos, pero en septiembre de 2024 se agotó su crédito presupuestario. Ahora se está licitando otro contrato para el mantenimiento.
La situación es grave. “En consecuencia, existe un elevado riesgo de que existan Parques de Bomberos que no dispongan de unidades de BRP’s para sus intervenciones, posibilidad sin precedente”, reconoce la Consejería. De momento, ya se han tomado medidas. Licitar un nuevo contrato, por el sistema de emergencia, para comprar esas 13 primeras BRP. El Cuerpo también ha sumado otras dos unidades de la misma tipología procedentes de la incorporación del servicio de extinción de incendios del Ayuntamiento de Fuenlabrada a la Comunidad de Madrid.
Vehículo accidentado en 2024
Todo este análisis de la situación de la flota está incluido en el contrato de emergencia que la Consejería ha tenido que licitar para reparar una BRP que sufrió un grave accidente el 7 de diciembre de 2024, en el que murió un bombero. El coste de la reparación es de 284.000 euros. Los pliegos del contrato radiografían el panorama del Cuerpo durante el verano: “desde hace tres existen 4 Parques de Bomberos (Aldea del Freso, San Martin de Valdeiglesias, Coslada y Valdemoro) con una única BRP. Otros tres Parques (Tres Cantos, Lozoyuela y Aranjuez) tampoco han podido disponer de una segunda unidad de BRP durante un mes. Los Parques de Bomberos de Lozoyuela y Coslada no contaron durante unas horas con BRP disponibles para la atención de emergencias. Y en otros Parques también es habitual que, en días puntuales, no se disponga de una segunda unidad de BRP”.
La Dirección General de Emergencias recuerda que es obligatorio “disponer de 2 unidades de BRP en cada parque para garantizar la atención simultánea de dos emergencias” y define como “grave situación de peligro para el ciudadano” la insuficiencia de vehículos BRP. El grupo parlamentario socialista ha llevado este asunto esta misma semana a la Asamblea. Pablo Cristóbal Mayoral, Director General de Emergencias, señaló que se está intentando revertir la situación y “que en 2025 se ha hecho un esfuerzo económico con 10 millones de euros para adquirir 178 vehículos”. El Cuerpo tiene de varios tipos, además de BRP. En total, más de 500 vehículos, de los que el 30% suma más de 20 años. “Esto provoca que tengamos más averías de lo deseado”. Cristóbal ha reconocido que este verano la media fue que entre el 10% y el 15% de las BRP estuvieran de baja.
José Luis García, diputado del PSOE, califica a la Consejería de “irresponsable” y la acusa de una “total falta de previsión porque conoce desde hace tiempo que la flota de BRP es muy antigua. La gestión ha sido nefasta. Tiene un plan de inversiones de vehículos de aquí a 2032. Es mucho tiempo. Esto es un fracaso. Con estos vehículos, ponen en riesgo a los profesionales que acuden a un incendio”.
El director general de Emergencias explicó que ya hay un nuevo contrato de mantenimiento para que la reparación de las averías sea más ágil y afirmó que en 2026 se va a invertir 18,5 millones de euros para adquirir, entre otros vehículos, 13 nuevas BRP y ocho Bombas Forestales Rurales. ”Es un problema de bastante envergadura”, ha reconocido Pablo Cristóbal.