El consejero andaluz de Sanidad, Presidencia y Emergencias, Antonio Sanz, ha negado este miércoles la desaparición de los historiales clínicos en la aplicación ClicSalud+ y ha acusado a la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Sevilla (Amama) de “provocar alarma social” al denunciar “sin pruebas” una supuesta destrucción de información médica.
En declaraciones recogidas por Europa Press que ha realizado este miércoles en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sanz ha insistido en que el problema registrado fue una “incidencia técnica temporal” y no la pérdida de datos. Ha comparado la caída del sistema con lo ocurrido este lunes con Amazon, que hizo que no pudieran comprarse entradas para los conciertos de La Oreja de Van Gogh. “Lamento evidentemente esa incidencia de caída, pero el día anterior lo tuvo Amazon y miren el concierto de La Oreja de Van Gogh, que había tanta expectación, pues se cayó el sistema también… Esto es una eventualidad, a nosotros en la Junta de Andalucía el sistema se nos ha caído muchas veces”, ha reconocido, aludiendo a la venta de entradas del grupo donostiarra fundado en 1996, que coincide con la vuelta de Amaia Montero como vocalista.
El consejo ha reiterado que la aplicación ClicSalud+ funciona desde la madrugada del miércoles, como ha confirmado la Junta de Andalucía esta mañana. Según ha detallado, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) restableció el acceso a todas las secciones de la plataforma a la 1:36 horas, tras varias horas de inactividad provocadas por un “incremento excepcional de usuarios”.
Sanz ha pedido “prudencia y serenidad porque estamos poniendo en riesgo un sistema que salva vidas”. “No se puede confundir una caída informática con una desaparición de pruebas. El sistema no ha eliminado nada, ni historias clínicas ni mamografías. Y eso se puede comprobar fácilmente accediendo de nuevo a la aplicación”, ha afirmado. Esto lo ha afirmado en referencia a Amama, después de que solicitasen a la Fiscalía investigar la desaparición y alteración de las pruebas médicas de las afectadas por la crisis de los cribados.
El titular de Sanidad ha explicado que, según la Agencia Española de Protección de Datos y Registro del Expediente, el sistema Diraya, donde se almacenan los datos clínicos, no permite eliminar información, salvo en casos muy concretos y bajo supervisión. Además, cuenta con copias de seguridad auditadas de manera regular. “Las historias clínicas deben conservarse de forma permanente, (…) salvo partes no esenciales de procesos ya cerrados, que tienen que eliminarse en un plazo legal de cinco a 15 años”, ha recordado. Además, ha añadido que las denuncias “sin prueba generan una alarma social que puede dañar gravemente un programa que salva muchas vidas”.
La denuncia de Amama
Durante la preparación de la denuncia, muchas mujeres se toparon con la imposibilidad de acceder a sus mamografías y ecografías, tanto a través de ClicSalud como en la plataforma Diraya, el sistema de gestión del SAS.
La presidenta de Amama, Ángela Claverol, explicó: “Ha desaparecido la mención de que la lesión es BI-RAD3 o que ya no pone lesión sospechosa, sino probablemente benigna. También han borrado el nombre de los radiólogos, en algunos casos”. “Estamos dejando en un estado de indefensión a muchas mujeres que quieren denunciar su caso. Es importantísimo que tengan el derecho de poder recabar sus propias pruebas y poder denunciar”, advirtió ante los juzgados.
*Con información de Europa Press