El 10 de julio de 2008 Apple abrió al público algo que por entonces era bastante inusual: una tienda de aplicaciones, la App Store, que nació para abastecer de software al iPhone, presentado un año antes.
Desde entonces, Apple ha ido ampliando su alcance para dar soporte a nuevas plataformas, como la del iPad y la Mac, pero siempre con información muy limitada sobre las apps disponibles.
Esto cambió hoy, con el debut de la versión web de la tienda, que dejará de ser una simple vidriera y permitirá tener muchísima más información, aprovechando el mayor tamaño que permite una interfaz web para computadoras de escritorio, de las apps disponibles para sus diferentes familias de dispositivos: iPhone, iPad, Mac, Watch, TV y Vision.

La versión web de la App Store (disponible en apps.apple.com) incluye también una pestaña de promoción de apps como se puede ver en el iPhone, listas de apps más descargadas, un buscador y mucho más.
Ausente por ahora, sin embargo, está la posibilidad de iniciar la descarga de una app a un dispositivo desde la web, como sí permite Google con la tienda de Android desde el inicio. Quizá llegue más adelante.
