“¡Adorni, Adorni!”, se escuchó en el repleto Salón Blanco de la Casa Rosada, mientras el presidente Javier Milei asentía. A su lado, Manuel Adorni vivía con una sonrisa sus últimos minutos antes de jurar como jefe de Gabinete, en reemplazo del renunciado Guillermo Francos.
El gabinete nacional casi completo -solo faltó el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona-, otros funcionarios, diputados libertarios, periodistas y los familiares del ya exportavoz presidencial fueron el marco para la jura de Adorni, que el Presidente encabezó un par de horas antes de su viaje a los Estados Unidos, donde participará de la America Business Forum y de la cumbre de la CPAC.

Los aplausos, prolongados, comenzaron cuando Milei y Adorni entraron al salón, cinco minutos después del mediodía, y continuaron durante la breve ceremonia de jura. El clima de jolgorio generalizado sirvió para mostrar algunas imágenes pensadas para alejar los rumores que crecen sobre la interna entre la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el asesor presidencial Santiago Caputo.
Además de saludar cordialmente a “El Jefe”, y sin quitarse sus anteojos de sol, Caputo pasó largo rato conversando con Eduardo “Lule” Menem, encargado de la campaña nacional hasta que el escándalo de las presuntas coimas en la Agencia de Discapacidad y la derrota en territorio bonaerense, el 7 de septiembre pasado, obligaron al Gobierno a correrlo de escena. Luego de recibir un largo y afectuoso abrazo del Presidente, Caputo completó la ronda de saludos al abrazar, luego de la jura, a Adorni, soldado de Karina Milei y del propio Presidente durante los casi dos años en los que trabajó como portavoz presidencial.
Sin dejar el hermetismo, cerca de Adorni confirmaron que el flamante ministro coordinador ya tomó las primeras decisiones operativas. Además de preparar una nueva reunión de gobernadores para la próxima semana, el jefe de Gabinete prevé mudarse entre viernes y lunes al despacho que, hasta el fin de la semana pasada, utilizaba Francos, en la plata baja de la Casa Rosada.
En el despacho que ocupaba el ministro del Interior, Lisandro Catalán, estará Diego Santilli, designado en su lugar pero con jura postergada. “Manuel va a estar encantado de tomar café con Santilli”, comentaron cerca del ministro coordinador, desmintiendo los rumores que ubicaban a Santilli fuera de la Casa Rosada, en las oficinas que el Ministerio del Interior tiene en la calle 25 de mayo.
Las conferencias de prensa, su especialidad desde el inicio del gobierno de La Libertad Avanza, seguirán estando entre las atribuciones de Adorni. Marcos Peña, durante el gobierno de Mauricio Macri, es el antecedente inmediato de un jefe de gabinete que se encargaba, además, de la difusión y comunicación de los actos de gobierno.
El llamado a las sesiones extraordinarias del Congreso para tratar las reformas que impulsa el Presidente se daría también en breve. Iría del 11 al 31 de diciembre, según fuentes oficiales. En cuanto a la nueva estructura que lo acompañará en la gestión, Adorni se reunirá en las próximas horas con los funcionarios heredados de Francos. El vicejefe de gabinete José “Cochi” Rolandi y su equipo serán los primeros, y le seguirán otros en los próximos días. Al secretario de Asuntos Estratégicos, José Luis Vila, cercano a Francos, le aceptará la renuncia presentada el sábado. Distinto será el destino de Daniel Scioli, que seguirá en su cargo de secretario de Turismo, Ambiente y Deporte, informaron.
“Daniel sigue por los próximos cuarenta años”, bromearon cerca del jefe de gabinete, dando por descontado que el exgobernador bonaerense y exvicepresidente continuará formando parte del gobierno libertario, bajo la órbita de la jefatura de gabinete y a pesar de la renuncia de su antiguo socio político, el ya exjefe de gabinete Francos.