
Durante su intervención ante el Congreso de Estados Unidos, Tom Barrack hizo un llamado enfático a que el Legislativo levante de manera definitiva las sanciones impuestas a Siria, sosteniendo que esta medida será determinante para consolidar la estabilidad y el desarrollo regional. Según informó el medio, Barrack aseguró que el retiro de dichas sanciones representaría el impulso necesario para fortalecer al nuevo Gobierno sirio, reactivar la economía del país y permitir que tanto la población siria como sus vecinos regionales tengan la posibilidad de prosperar. En sus palabras, «instamos al Congreso a dar este paso histórico. Hemos avanzado mucho, pero ahora necesitamos un último y firme impulso para fortalecer al nuevo Gobierno sirio, reactivar su economía y permitir que el pueblo sirio y sus vecinos regionales no solo sobrevivan, sino que prosperen».
De acuerdo con la información publicada, Barrack, quien ocupa el cargo de enviado especial estadounidense en Siria y embajador de Estados Unidos en Turquía, planteó este jueves que redefinir las relaciones de Siria con Turquía e Israel es el “siguiente paso” para allanar el camino hacia la paz en Oriente Próximo. El funcionario resaltó la reciente reunión entre el secretario de Estado Marco Rubio, el ministro de Exteriores turco Hakan Fidan y el ministro de Exteriores sirio Asaad al Shaibani. El medio destacó que, en ese encuentro, se estableció un marco común que sienta las bases para desarrollar la relación futura entre Siria, Turquía e Israel.
Según detalló el medio, Barrack remarcó la importancia de integrar a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) en las instituciones económicas, militares y cívicas del país. Se refirió a esta integración como un avance necesario en los esfuerzos por reestablecer el orden, la seguridad y el desarrollo económico. En su declaración afirmó que “Siria se erigirá como socio comprometido con el esfuerzo global para lograr la paz”.
El diplomático estadounidense enfatizó que el levantamiento de las sanciones permitiría a Siria comprometerse activamente en la desarticulación de grupos catalogados como terroristas, incluidos Estado Islámico, la Guardia Revolucionaria iraní, Hamás, Hezbolá y otras redes de actividades violentas en la región. Según consignó el medio, Barrack subrayó que solo con la retirada de las restricciones comerciales y financieras Estados Unidos facilitaría que el Gobierno sirio desempeñe un papel activo y constructivo en la seguridad internacional.
En su comunicado, difundido a través de redes sociales y recogido por el medio, Barrack valoró especialmente el papel que Turquía cumple en este nuevo contexto regional. Reconoció lo que calificó como el “incansable papel de Turquía”, argumentando que Ankara merece un reconocimiento particular por haber ejercido una diplomacia discreta pero firme, considerada clave para superar viejas barreras y normalizar relaciones en la zona.
Según reportó el medio, Barrack admitió que “la integración es un proceso, no un evento”, y sostuvo que la visión que al principio era “la de un solo hombre, ahora es compartida por muchos y puede convertirse en realidad”. En este sentido, instó a ofrecer “una verdadera oportunidad para Siria”, planteando que el país puede, a partir de estos cambios, incorporarse de manera plena a la comunidad regional y global.
El medio enfatizó que estos planteamientos surgen en un momento en el que la política estadounidense sobre Siria se encuentra en revisión, debido tanto a los cambios en la dinámica regional como a la evolución de los actores involucrados en el conflicto. Barrack aseguró, según el medio, que la nueva estrategia busca asegurar la estabilización de la región en beneficio de todos los países implicados. Su intervención ante los legisladores buscó persuadir al Congreso estadounidense para que adopte medidas que aceleren la reinserción de Siria en la política y la economía internacionales.
Durante su intervención, Barrack dejó claro que la reconfiguración de los lazos entre Siria, Turquía e Israel representa una oportunidad para el desarrollo de una estrategia común de seguridad y cooperación en Oriente Próximo. Dijo que el reciente encuentro diplomático entre las partes supone un avance relevante hacia la formación de un nuevo marco regional de relaciones.
Tal como publicó el medio, el embajador estadounidense recalcó que el proceso de integración regional, aunque complejo, es necesario para garantizar la permanencia de la estabilidad política, la seguridad y el crecimiento económico en Siria y sus países vecinos. Dirigió su mensaje a los legisladores estadounidenses solicitando apoyo decisivo para que el nuevo contexto político en Siria resulte viable y sostenible en el tiempo. Señaló que la colaboración internacional resulta fundamental para alcanzar este objetivo y que Estados Unidos puede desempeñar un papel central en la revitalización de la zona a través de la remoción de sanciones y la promoción del diálogo entre los actores involucrados.
Barrack, concluyó el medio, abogó porque las decisiones que se adopten en Washington sobre Siria tomen en cuenta los avances logrados en la diplomacia regional y las oportunidades que se abren a partir de la redefinición de las relaciones internacionales de Damasco. Pidió confiar en las posibilidades de integración efectiva, insistiendo en que el país puede transformarse en un socio constructivo, capaz de impulsar iniciativas de paz y desarrollo económico en Oriente Próximo.
