Mientras se discute la existencia o no de una burbuja financiera creada por las inversiones en inteligencia artificial, Nvidia reportó hoy ingresos récord. Tras el cierre del mercado, la empresa publicó los resultados correspondientes al tercer trimestre fiscal de 2025: registró ingresos por US$57.000 millones, un salto del 62% interanual y del 22% respecto del trimestre anterior.
La acción de Nvidia cerró hoy en US$186 y, tras la publicación del reporte, comenzó a reflejar el impacto del informe en el mercado. En el aftermarket, alrededor de las 18:45, la cotización se acercaba a US$194, lo que representa un aumento de aproximadamente 4,3%.
El desempeño volvió a concentrarse en el negocio de Data Center, que ya es sinónimo del auge de la IA generativa. Esta división alcanzó US$51.200 millones en ingresos, lo que implica un incremento del 66% interanual, traccionado por tres grandes transformaciones tecnológicas: la computación acelerada, la adopción masiva de modelos potentes de IA y el avance de las aplicaciones agentic.
Por qué el mundo financiero está en vilo por los balances de una empresa
La arquitectura Blackwell Ultra se convirtió en la opción preferida de clientes de todos los segmentos, mientras que la versión anterior, Blackwell, siguió mostrando una demanda sólida. En contraste, las ventas de la línea H20 fueron insignificantes durante el trimestre, según el informe que presentó la empresa.
Dentro del negocio de centros de datos, la computación propiamente dicha representó US$43.000 millones, un 56% más que hace un año y un 27% más que en el trimestre previo. La división de networking también registró un hito: ingresó US$8200 millones, un salto del 162% interanual, gracias al crecimiento de NVLink para los sistemas GB200 y GB300.
Nvidia también difundió sus proyecciones para el cuarto trimestre fiscal de 2026, que apuntan a una continuidad del fuerte ritmo de expansión. La compañía anticipó ingresos por US$65.000 millones, con un margen de variación de 2%, y márgenes brutos cercanos al 75%.

Nvidia proyectó, por último, una tasa impositiva del 17%, con un rango de variación de un punto porcentual, en un marco que sugiere que la compañía no prevé una desaceleración en la demanda de infraestructura de inteligencia artificial hacia el cierre del ejercicio.
Un reporte clave para Wall Street
El anuncio de hoy se produjo en un contexto de fuerte expectativa. Nvidia, cuyo valor de mercado supera el billón de dólares, llegó al reporte con oscilaciones marcadas en el precio de su acción y con la atención total de los inversores.
“Nvidia se considera casi un reflejo de lo que está sucediendo en el ámbito de la inteligencia artificial”, afirmó a Reuters Matt Orton, estratega jefe de mercado de Raymond James Investment Management. Según el especialista, lo que informe la compañía marca el pulso del sector, que a su vez se transformó en “el principal impulsor del rendimiento del S&P 500 este año”.

El mercado venía de semanas de dudas sobre si el entusiasmo por la IA estaba comenzando a perder fuerza. El propio Sam Altman, CEO de OpenAI, sostuvo recientemente que el ecosistema está en una “burbuja”: “¿Los inversionistas están demasiado entusiasmados con la IA? Sí. ¿Es la IA lo más importante que ha sucedido en mucho tiempo? También sí”, afirmó.
A esas señales se sumaron algunos movimientos inquietantes, como la salida del fondo Thiel Macro —de Peter Thiel—, que liquidó toda su posición en Nvidia durante el tercer trimestre. Esa participación tenía un valor estimado de US$85 millones en la última evaluación.
Acierto de los analistas
Pese a esos temores, expertos de Goldman Sachs y Morgan Stanley habían anticipado que el informe confirmaría la continuidad del ciclo expansivo de la empresa. Según proyecciones citadas por Morningstar, Nvidia seguirá mostrando “otro año de fuerte crecimiento de dos dígitos en ingresos y ganancias”.
Brian Colello, estratega tecnológico de la misma firma, enfatizó que es poco probable que los inversores reaccionen negativamente al desempeño de la compañía, aunque una eventual caída “arrastraría al resto del sector de inteligencia artificial”.
La reacción del mercado en las próximas horas será decisiva, no solo para Nvidia —una empresa que tardó apenas 13 meses en pasar de una valuación de US$3 billones a US$4 billones— sino para todo el ecosistema tecnológico global. El récord alcanzado en el tercer trimestre parece reafirmar que, aun en medio de cuestionamientos y advertencias, la demanda por infraestructura de IA sigue escalando sin pausa.
