Con los precios del alquiler disparados en buena parte de España, la idea de sustituir un piso por una casa sobre ruedas ha dejado de ser una rareza para convertirse en una opción que muchos jóvenes empiezan a plantearse. Pero la pregunta clave sigue siendo la misma: ¿sale realmente más barato vivir en una autocaravana que en un piso de alquiler?
El creador de contenido Zapa, conocido en redes como @mellamanzapa, lleva tiempo viviendo en una autocaravana y ha aprovechado esa experiencia para compartir una comparativa directa de los gastos mensuales de ambas opciones. Sus cifras, basadas en su día a día, muestran cómo varía el coste de mantener una vivienda convencional frente a vivir en apenas diez metros cuadrados sobre ruedas.
CUÁNTO CUESTA VIVIR EN UNA AUTOCARAVANA
Para Zapa, los dos factores principales son el préstamo del vehículo y los suministros básicos. En su caso, la cuota mensual oscila entre 300 y 600 euros, según el modelo elegido y las condiciones de financiación. A esto se suma el seguro, que sitúa entre 40 y 60 euros al mes, en función de la cobertura contratada.
El gasto en gas y gasolina lo calcula entre 20 y 50 euros mensuales si se realizan trayectos cortos y se mantiene una rutina de desplazamientos reducida. Vivir en una autocaravana implica consumir menos energía que en un piso, especialmente si se cuenta con placas solares o áreas habilitadas para cargar baterías.
En cuanto a los suministros, destaca que la luz y el agua tienen un coste mínimo. «Yo pago 12 euros al mes», afirma, haciendo referencia a los servicios asociados a algunos campings o áreas de autocaravanas donde se puede acceder a duchas, electricidad o vertido de aguas residuales.
LOS GASTOS DE VIVIR EN UN PISO DE ALQUILER
La comparación con un piso de alquiler es más contundente. Zapa estima que el coste mensual de alquilar una vivienda en España se sitúa entre 600 y 1.500 euros, dependiendo de la ciudad, el tamaño y las características del inmueble. A esto se suman los suministros domésticos: luz y agua entre 100 y 150 euros, además de gastos de comunidad, basura y otros conceptos que rondan los 30 euros al mes.
Desde su punto de vista, la diferencia de costes es evidente. Mientras que la autocaravana permite mantener todos los gastos dentro de una franja reducida, vivir en un piso implica asumir un volumen de pagos fijos considerablemente más alto. «Si haces la cuenta rápida te estás dando cuenta de que vivir en una autocaravana es mucho más rentable que en un piso», resume.
A pesar de la diferencia económica, Zapa plantea una cuestión esencial: el estilo de vida. «Aquí la pregunta es: ¿podrías vivir con todo lo que tienes en 10 metros cuadrados?», reflexiona. La falta de espacio, la necesidad de organizarse de forma estricta y la vida móvil no son adecuadas para todas las personas.
