En la carrera por posicionarse como tercera fuerza de la Cámara de Diputados, los bloques de Pro y de la UCR, junto a MID, exploran la posibilidad de aunar esfuerzos y convertirse en el fiel de la balanza entre La Libertad Avanza y Unión por la Patria, que por ahora quedaron empardados en 94 integrantes cada una.
Las reuniones son febriles por estas horas. Tal como anticipó LA NACION, radicales y macristas, que ya supieron convivir en un interbloque durante las gestiones de los expresidentes Mauricio Macri y Alberto Fernández, aspiran a volver a convivir en un interbloque para convertirse, junto a los desarrollistas, en un espacio que reúna una veintena de diputados.
Los gobernadores, en tanto, buscan también disputar el tercer puesto, aunque divididos. Por un lado compite Provincias Unidas −encabezado por Córdoba y Santa Fe− e Innovación Federal, liderado por el los gobernadores de Salta y de Tucumán.
La novedad de esta coalición Pro-UCR es que ya no se mostraría tan dócil con el Gobierno como durante la primera etapa del mandato de Milei. Frente a la amenaza común de un oficialismo decidido a fagocitarlos, ambos bloques buscan restañar las heridas por las fugas sufridas y recuperar la autonomía e identidad perdidas.
La bancada que conduce Cristian Ritondo (Pro) quedaría reducida a 14 miembros. El radicalismo, en tanto, espera consolidarse con 8 integrantes. A ellos se sumarían los dos desarrollistas.
“Todavía no está cerrado. Estamos negociando”, indican desde las bancadas.
Lo que sí tienen claro ambos bloques es que ya no ofrendarán gratis su voto al oficialismo. La UCR reclama que se le reconozca su permanencia en el Consejo de la Magistratura; a la demora del oficialismo le respondió con el retaceo de su apoyo a la libertaria Lorena Villaverde para que asuma en el Senado.
En Pro, otrora aliado incondicional, el malestar es elocuente con LLA. Ritondo se desmarcó de Bullrich en la última reunión de la Comisión Bicameral de Inteligencia. “Caranchean diputados y esa no es la manera de construir”, reprochan.