
Sidi Mohamed Omar, representante del Frente Polisario ante Naciones Unidas, explicó que el secretario general de la ONU, António Guterres, comunicó recientemente al líder del Frente Polisario, Bhraim Ghali, que su enviado personal para Sáhara Occidental, Staffan de Mistura, continuará manteniendo contactos tanto con el Frente Polisario como con Marruecos con la meta de establecer negociaciones “sin condiciones previas”. De acuerdo con lo declarado por Omar en una entrevista con la agencia estatal argelina de noticias APS, el Frente Polisario no ha recibido hasta el momento ninguna “invitación oficial” de parte de Naciones Unidas para reanudar el proceso de diálogo con Marruecos. El medio APS recogió sus palabras al afirmar que “aún no se ha recibido ninguna invitación oficial para reanudar las negociaciones con el Estado ocupante de Marruecos”.
Tal como publicó APS, las declaraciones de Omar se dieron en un contexto marcado por el incremento de los respaldos internacionales al plan de autonomía presentado por Rabat. Dicho plan, que Marruecos promueve como solución para el Sáhara Occidental, ha sido rechazado repetidamente por las autoridades saharauis, quienes insisten en la celebración de un referéndum de autodeterminación. El representante saharaui subrayó en la entrevista que el rumbo de la cuestión sigue dependiendo de Naciones Unidas y de la aplicación de su Carta, que ampara el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el 31 de octubre una resolución que extiende durante un año el mandato de la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO). Según consignó APS, la resolución recibió el visto bueno tras ser presentada por Estados Unidos y expresa el respaldo al plan de autonomía defendido por Marruecos. Omar señaló que la medida “reafirmó su firme apoyo a los esfuerzos del secretario general y su enviado personal, subrayando la necesidad de avanzar en el proceso político hacia unas negociaciones genuinas que garanticen el derecho inalienable del pueblo saharaui a la autodeterminación y la independencia”.
La disputa por el territorio del Sáhara Occidental hunde sus raíces en 1975, cuando Marruecos ocupó la antigua colonia española tras la retirada de España, según relató APS. Desde entonces, el Frente Polisario resistió la ocupación y el conflicto armado entre ambas partes se prolongó hasta 1991. Ese año, se acordó un alto el fuego con vistas a organizar un referéndum de autodeterminación tutelado por la ONU, aunque diferencias persistentes sobre la elaboración del censo y la posible inclusión de colonos marroquíes han impedido la preparación y convocatoria de la consulta.
En noviembre de 2020, el Frente Polisario anunció que consideraba roto el alto el fuego con Marruecos. Según recordó APS, esta decisión respondió a una operación militar marroquí contra activistas saharauis en la región de Guerguerat, considerada por el movimiento independentista como una violación del acuerdo de distensión alcanzado décadas antes. Esta ruptura agudizó las tensiones y reactivó el conflicto de baja intensidad en la zona.
En los últimos años, el Frente Polisario ha experimentado una pérdida de apoyos diplomáticos en el escenario internacional, incluidas posturas como la del Gobierno español que se ha alineado con la propuesta de autonomía de Marruecos. Tal como recordó APS, la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), proclamada por el Frente Polisario, mantiene su rechazo tajante a este plan marroquí. Las autoridades saharauis sostienen que la única alternativa legítima continúa siendo la descolonización total del Sáhara Occidental y la garantía del derecho a la independencia para su población.
La entrevista con Omar, detallada por la agencia argelina, volvió a situar en el debate internacional la falta de avances concretos en el proceso auspiciado por Naciones Unidas y las divergencias existentes entre las partes sobre el futuro del territorio. El Frente Polisario considera que el respaldo creciente al plan de Rabat no responde a la legalidad internacional ni a las resoluciones originales del propio Consejo de Seguridad. Pese a la reciente aprobación de la extensión del mandato de la MINURSO y la continuidad de los contactos diplomáticos bajo la supervisión de Staffan de Mistura, el proceso de negociación sigue sin fecha definida ni invitaciones formales, según publicaron las fuentes consultadas por APS.
