Chus Gutiérrez, directora de la película ‘Me has robado el corazón’, destaca que la actualidad social en España refleja fenómenos que afectan transversalmente a varias generaciones, como el acceso a la vivienda y la precariedad laboral. Según declaraciones recogidas por la prensa, Gutiérrez identificó una expansión del problema habitacional y laboral, observando que personas de hasta 50 años pueden terminar compartiendo piso, una situación que antes era más propia de jóvenes. De acuerdo con lo reportado por los medios, la nueva cinta ilustra estas tensiones desde las vivencias de sus personajes y las palabras de su elenco principal.
El largometraje, que llega a las salas este viernes 5 de diciembre, incorpora a Óscar Casas y Ana Jara como protagonistas. Tal como publicó el medio, el relato recorre la historia de Eric, interpretado por Casas, un joven que no puede mejorar su posición laboral pese a su esfuerzo y títulos académicos. Como respuesta a esa falta de oportunidades, el personaje orquesta el robo de un banco y engaña a Vera, encarnada por Jara, para convertirla en su vía de escape. Casas mencionó que la situación de su personaje refleja la realidad de numerosos jóvenes españoles. “Trabajas tanto, tienes carreras, tienes másters… Lo das todo y te das cuenta de que nada de esto llega, no vale”, afirmó el actor, subrayando la frustración que genera la ausencia de resultados tras el esfuerzo.
La trama de la película, escrita y dirigida por Gutiérrez, muestra a Eric atrapado en trabajos temporales que compagina con sus estudios, sin lograr avanzar económica ni profesionalmente. El medio detalló que Casas encuentra similitud entre su experiencia actoral y la de muchos de su generación, quienes experimentan altos niveles de frustración y precariedad. El actor señaló que el coste excesivo del alquiler y el poder adquisitivo menguante condicionan profundamente la vida de los jóvenes, expresando que el ascenso social parece inaccesible: “El alquiler está tan alto, la vida cada vez está más cara, la inflación… Hay un punto en el que no tienes posibilidad de crearte un futuro, de poder tener tu casa”, declaró según citó la prensa.
Según recogió el medio, Ana Jara aportó su perspectiva indicando que la problemática no afecta únicamente a los jóvenes, sino que se extiende a otras edades, forzando a adultos de hasta 50 años a compartir viviendas o asumir la inestabilidad residencial. Para Jara, la tranquilidad está estrechamente relacionada con el sostén económico: “La estabilidad económica forma parte de la tranquilidad”, explicó la actriz, al tiempo que expuso que la procedencia y el entorno familiar determinan las posibilidades de progreso individual: “Dependiendo de la familia en la que nazcas y el código postal en el que nazcas, tu realidad es una u otra”.
Óscar Casas enfatizó, en declaraciones al medio, que el foco de atención pública no debería cargar la responsabilidad sobre generaciones previas, sino examinar las decisiones y políticas en los niveles más altos de gestión. “Tenemos que luchar y salir e intentar que esto cambie porque no vamos a buen puerto”, manifestó el actor, subrayando la necesidad colectiva de afrontar el sistema que perpetúa estas condiciones. El intérprete, además, reconoció que la carencia de solvencia financiera limita directamente la libertad individual, un factor que, según sus palabras, incrementa la frustración personal y social.
La cineasta Chus Gutiérrez consideró que la situación económica y social actual puede definirse como “el tiempo de los monstruos”, una metáfora que, según reportó la prensa, emplea para referirse a la defensa de modelos capitalistas en crisis. Gutiérrez explicó que quienes se ven desprovistos de estabilidad económica carecen también de autonomía, defensa y posibilidades de transformar su vida de manera significativa.
El desarrollo de la película implicó retos para los intérpretes, como la adaptación de Casas al acento gallego de su personaje, ya que compartía escenas con el actor gallego Luis Zahera. Casas admitió, según consignó el medio, haber abordado este desafío con responsabilidad, mostrando respeto hacia la cultura y la lengua gallegas.
El reparto incluye, además de Óscar Casas, Ana Jara y Luis Zahera, a actores como Antonio Pagudo, Miguel de Lira, Ana Milán, Arturo Valls, Alba Gutiérrez, Mario Marzo, Pol Granch, Juan Amoedo, Xurxo Carreño, Lucía Veiga y Francis Lorenzo, entre otros, según informó el medio. La cinta plantea preguntas sobre la movilidad social y la dificultad para lograr independencia económica en el contexto español contemporáneo, alternando momentos de humor con el drama social y personal de sus personajes.
Según recogió la prensa, la propuesta de Gutiérrez integra el relato de la crisis social con el desarrollo individual de los personajes, mostrando cómo los obstáculos en el mercado laboral y el acceso a la vivienda no solo afectan a los jóvenes, sino que modelan la convivencia y las aspiraciones de generaciones enteras. Las declaraciones de los protagonistas y la directora se centran en la urgencia de abordar condiciones que impiden la planificación a largo plazo y la construcción de proyectos vitales estables. La película, según la misma fuente, toma estas frustraciones y las transforma en motor narrativo, permitiendo que espectadores de distintas edades y contextos se identifiquen con los conflictos que presenta.
